Hay dos fotos; la primera, la movilización que hoy realiza la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) hacia la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (COPAL) y unas 20 fábricas de alimentos, para exigirle a las empresas formadoras de precios del país que “no se hagan los vivos y vendan precios justos”.
Por otro, ayer en el Sheraton de Retiro los “dueños” de la Argentina celebrando el 20º aniversario del foro de la Asociación Empresaria Argentina (AEA). Entre ellos, Federico Braun, dueño de la cadena con ventas superiores a $30.000 millones, quien afirmó a tono de burla ante la pregunta del periodista Ricardo Kirschbaum,“¿qué hace La Anónima por la inflación?”: “remarcan los precios todos los días”.
Seguido de la polémica declaración Braun dijo que, “para ser sinceros, yo tengo más de 40 años en la experiencia supermercadista, y siempre hubo control de precios. Es insólito que sigan creyendo en esa herramienta. Somos formadores de precio en una parte, en realidad trasladamos cuando podemos trasladar. Yo creo en la absoluta libertad de precios”. Y agregó: “El principal problema son los impuestos. Si ustedes miran lo que pagamos de impuestos, en comparación con otros países latinoamericanos, es ridículo”.
Minutos después, la vicepresidenta, Cristina Fernández, escribió un tweet en el que repudió el accionar del CEO y sostuvo: “Recién, en la Jornada por los 20 años de Asociación Empresaria Argentina (AEA), el dueño de una de las cadenas de supermercados más grande del país te cuenta lo que hacen todos los días”.
En la otra foto, una inflación que amenaza con terminar el año en dos dígitos, y una canasta básica de indigencia ubicada por encima de los 45 mil pesos que deja al 40% del país bajo la línea de la pobreza.
Con la consigna de “bajen los precios”, movilizará hoy desde las 11 horas por calle 25 de Mayo, el sector de la Economía Popular, quienes afirman que a los dueños de estas empresas “solamente se les está exigiendo que no especulen con los precios mientras los y las de abajo luchan por comer dignamente”. Y agregaron que es necesario que “no sigan aumentando algunos productos estratégicos para garantizar un acceso justo a los alimentos para las familias que peor la están pasando”.
Una de las propuestas del sector es un precio diferencial de los alimentos que se destinan a comedores y merenderos barriales para, así, abaratar los costos del servicio. En la movilización de hoy el gremio pretende dejar en la cámara empresaria un pedido de audiencia para luego poder plantear dichas demandas y propuestas. Asimismo, anticipan que, en caso de no obtener una respuesta satisfactoria a sus demandas, podrían volver a movilizarse.
A su vez, se espera la adhesión de los gremios cegetistas en otra eventual marcha “contra la suba de precios”. Sobre todo luego del amague de una marcha contra la “inflación” que impulsaría la CGT, la cual no se terminó llevando adelante. Según el ala moyanista y en la Corriente Federal fue el triunvirato de la cúpula los que bajaron la mencionada marcha. Sin embargo, la medida tuvo el respaldo del Secretario General de la Central de Trabajadores de la Argentina , Hugo Yasky.
¿Quiénes son los dueños de la Argentina?
En el recinto donde se festejaron las dos décadas de la AEA se encontraban, Hector Magnetto (CEO Clarín), Paolo Rocca (Techint), Luis Pagani (Arcor), Alberto Hojman (BGH), el mismo Braun (La Anónima), Martin Migoya (Globant), entre otros.
Dentro de la industria alimenticia, la concentración es evidente; actualmente 20 empresas manejan el mercado de alimentos de nuestro país. Pero el número se achica aún más cuando se trata del circuito de distribución; seis grandes de cadenas de supermercados e hipermercados son los que abastecen, tanto a los minoristas como a los ciudadanos de a pie. Las mismas son Carrefour (Francia); Cencosud (Chile) que poseen Disco, Jumbo y Vea; Coto (Argentina); Walmart (Argentina), que incluye la cadena Chango Más; La Anónima (Argentina); y Día (España).
Según un informe de Página 12, del periodista Leandro Renaud, “entre Coca Cola y Pepsi se reparten el 82% de la venta de gaseosas y aguas”, mientras que la marca Bimbo vende el 80% del pan lactal y la empresa Ledesma, de Carlos Blaquier quién se encuentra acusado de participar activamente en la última dictadura cívico-militar, tiene el 75% de las ventas de azúcar.
Por otro lado, 9 de cada 10 litros de leche en el país son distribuidos por la compañía Mastellone, dueña de La Serenísima, que además ocupa el 70% de la góndola con sus productos lácteos. El 40% de Mastellone, pertenece a la compañía Arcor, de Luis Pagani, una empresa que judicializó el aporte a las grandes fortunas durante la pandemia y que obtuvo ganancias y dividendos récords los últimos dos años.