SUPA logró levantar la quiebra del gremio decretada a fines de los 90

El Sindicato Unidos Portuarios Argentinos (SUPA) Puerto Capital Federal y Dock Sud logró la cancelación de la quiebra que databa del año 1998 y que había sido heredada por la actual conducción de la organización sindical que lidera Juan Corvalán.

Con fecha 12 de abril, el juez a cargo del Juzgado Nacional en lo Comercial N° 7 Secretaría N° 13 resolvió ante el pedido formulado por el SUPA, declarar cancelada la quiebra por un mix entre avenimiento y pago total, censando con dicha decisión todos los efectos de la quiebra que pesaban sobre el sindicato.

De esta forma, el gremio logró revertir la muy criticada Resolución del la Sala A de la Cámara Nacional en lo Comercial, la que en diciembre de 2018 había resuelto luego de más de 20 años del proceso falencial, la cancelación de la personería gremial y la intervención del sindicato, lo que nunca llegó a concretarse atento a la cancelación de la quiebra ahora decretada.

Cabe destacar que dicha resolución de la Cámara Comercial llegó a originar una reunión académica en la sede de la Asociación Argentina del Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social, en la que los doctrinarios que expusieron, Dres. Ernesto Martorell y Pablo Topet, fueron altamente críticos con el dictamen en cuestión.

En esa jornada se generó un amplio consenso entre los partícipes respecto a la necesidad que las organizaciones sindicales merecerían una regulación específica dentro del régimen de concursos y quiebras, como la que hoy tienen las organizaciones deportivas, atento a los fines de defensa de los intereses colectivos que persiguen, distintos a los de una empresa.

Así, la conducción de Corvalan, desde el año 2005 hasta la actualidad, logró levantar el concurso de la obra social y ahora la quiebra del sindicato, en un hecho sin precedentes en la actividad gremial.

Ahora el gremio se encuentra abocado a la situación del Puerto de la Ciudad de Buenos Aires, el que se encuentra transitando un proceso licitatorio, atento al próximo vencimiento de las actuales concesiones, habiéndose fijado como prioridad la preservación de la totalidad de las fuentes de trabajo de los trabajadores portuarios.