La Justicia ordenó normalizar el servicio de la Línea 60 de colectivos

Los trabajadores de la línea 60, que mantienen un conflicto con la empresa Monsa tras el despido de 53 choferes, fueron notificados en las últimas horas de una orden judicial que los llama a normalizar el servicio con el cronograma habitual.

Los choferes advirtieron, sin embargo, que «continuarán los inconvenientes porque la empresa no hace nada para sacar los colectivos a la calle» e informaron que brindarán un «servicio de emergencia» sin cobrar boleto.

«Fuimos notificados por el juez de Garantía y se constató que está todo en perfectas condiciones para que la empresa pueda retomar su servicio», dijo hoy el delegado Juan Tejada. El referente gremial manifestó esta tarde que la cantidad de colectivos de la línea 60 que circulan es «mínima», porque «ningún representante de la empresa se hace presente en la terminal».

Ayer los choferes realizaron una marcha con corte de calles en el centro porteño para reclamar la reincorporación de trabajadores despedidos y el cese inmediato de las «suspensiones arbitrarias».

El conflicto entre Monsa y los choferes comenzó el 25 de junio, cuando los trabajadores decidieron no cobrar boleto en repudio al despido de uno de trabajadores, tras lo cual la compañía echó a otras 47 personas y los conductores denunciaron el envío de cinco telegramas más de despido.

El servicio de la línea 60 no funcionó durante cinco días hasta que los trabajadores decidieron, hace una semana, volver a conducir las unidades pero sin cortar boletos. El conflicto continuó con una merma en la cantidad de unidades en servicio, a raíz de que la empresa bloqueó la salida de colectivos del playón de la localidad bonaerense de Ingeniero Maschwitz, en Escobar.

La línea 60 de colectivos, con 19 ramales, transporta diariamente a unas 250 mil personas y une el barrio porteño de Constitución con los partidos bonaerenses de Escobar y Tigre.