“La explotación laboral en Salta es muy preocupante”

«Hoy, por suerte, tenemos una legislación que garantiza derechos y ampara a los trabajadores, pero lo que pasa es que para hacerlo cumplir tiene que estar el Estado. Si tuviéramos que hacer una evaluación tendríamos que decir que en la provincia de Salta estamos muy lejos del objetivo», indicó.

El Congreso Nacional sancionó a fines de 2011 el nuevo régimen de trabajo agrario, bajo la ley 26.727. El texto legislativo contempla la remuneración, el pago de las horas extras, antigüedad, el pago de los días feriados, descanso y contrato de trabajo agrario. Además asegura a los trabajadores el traslado, alimentación, vivienda, agua potable, entre otras cuestiones.

«Todo esto sigue siendo problema, son como las luces rojas que aparecen en la inspección. Lo importante es que algunos productores aceptan que los problemas existen, que hay incumplimientos y temas sin resolver y quieren encontrarle una solución», destacó Giménez.

Hasta antes de diciembre del 2011, el régimen de trabajo rural era de sol a sol. Después de la sanción de la nueva ley, se establecieron ocho horas y se equiparó con todos los regímenes laborales del país. En cuanto a la remuneración básica, el sueldo de un peón general es de $ 4.082 mensual y de $ 179 el jornal.

Según lo informado por la titular de Renatea Salta, se supo que «de todos los sectores productivos que existen en la provincia, el sector arándanos, tabaco y vid son los que mayor cumplimiento tienen de la legislación y la menor cantidad de irregularidades». Mientras que «los sectores como el de las frutas, las hortalizas y las madereras están muy atrasados en cuanto al cumplimiento de la legislación y siguen teniendo un porcentaje muy alto de trabajo en negro».

«Uno de los sectores más significativos es el tabacalero. Es una de las actividades más importantes y la que incorpora mayor cantidad de trabajadores rurales permanente y temporarios. Nosotros con el sector tabacalero venimos trabajando muy bien. Lo que registramos es que en ese sector está inscripto casi un 90% de los empleados. Además, en agosto firmamos con la Cámara del Tabaco un convenio de registración y de deuda por aportes y contribuciones. El trabajo infantil en una época era muy preocupante en el tabaco», explicó.