Gamarra aseguró que siguen trabajando por los derechos de los trabajadores y que seguirán trabajando en la misma línea. Asimismo, el dirigente declaró que el 90 por ciento de la gente que intentó tomar el sindicato eran propietarios de unidades que no tienen nada que hacer en la casa de los empleados de taxis; y en un acto vandálico se llevaron todo lo que habían logrado tener para los trabajadores.
El gremialista presentó la denuncia policial para que se averigüe donde están las cosas que se robaron de la casa de los trabajadores; y el porqué de ese acto de violencia contra la institución y de las personas que estaban allí adentro.
Indicó además, que en la ciudad de Posadas hay unas mil cien unidades entre taxistas y remisses, los cuales para el gremialista serían suficientes para cubrir los servicios requeridos por la comunidad. Explicó que los datos que se cuenta en el sindicato, brindados por el municipio muestran que solo hay una mínima disminución de la cantidad de licencias otorgadas cada año y que el sindicato no considera eso como negativo.