El Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop) reafirmó la necesidad de regresar a la presencialidad de cara al comienzo del nuevo ciclo lectivo, aunque pidió que se garanticen las “condiciones saludables y seguras” en todos los establecimientos educativos.
El secretario general de la entidad gremial, Jorge Kalinger, ratificó que “los trabajadores de la actividad quieren regresar a las aulas y dictar clases presenciales” pero bajo los parámetros necesarios de cuidado y acondicionamiento.
La organización sindical que nuclea más de 70.000 trabajadores privados solicitaron una vez más que se garanticen los acuerdos alcanzados en el Consejo Federal de Educación (CFE) y en el marco de la Paritaria Nacional Docente.
“La Resolución CFE 370/20 determinó un semáforo sanitario que evalúa en cada jurisdicción la situación epidemiológica, como un primer paso a la hora de definir el regreso a la presencialidad. También hay que cumplir los protocolos, las actas-acuerdo del 4 de junio y 24 de julio de 2020, las 12 condiciones básicas de infraestructura escolar de la paritaria de febrero de 2011 y las Resoluciones aprobadas en 2020”, precisó Kalinger.
Asimismo, el referente de los trabajadores del sector se refirió a la importancia de proteger la salud del personal de la actividad y de la comunidad educativa en su conjunto, según lo que contempla la Ley de Contrato de Trabajo (LCT).
“La necesidad de volver a clases presenciales debe respetar los protocolos de salubridad y preservar las condiciones dignas de trabajo de los docentes nacionales. Regresar a una escuela saludable y segura depende del estricto cumplimiento del andamiaje normativo construido con consenso y de una fuerte participación en el lugar de trabajo”, insistieron desde Sadop.