La fuerte banca de los movimientos sociales a la CGT: «La estrategia de lucha es la correcta»

La Confederación General del Trabajo (CGT) continúa sumando respaldos al paro general del próximo 9 de mayo en rechazo a las políticas del gobierno de Javier Milei.

Tras confirmarse en las últimas horas la adhesión de las dos CTA, los movimientos sociales le dieron un nuevo espaldarazo a la conducción cegetita con una fuerte banca al plan de acción diseñado.

Alejandro Gramajo, secretario general de la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP), señaló que «la estrategia que trazó de la CGT es la correcta».

«No creo que el paro del 9 de mayo haya quedado largo. Hay que ser respetuoso con los tiempos de cada sector que va fijando agenda de lucha porque uno tiene que tratar de construir síntesis, que no es sencillo«, declaró el dirigente.

En diálogo con AM 530, el titular de la UTEP sostuvo que «la estrategia de la CGT, como la de la CTA y los movimentos populares o los universitarios tiene que ver con cuidar la unidad y que cada acción no sea aislada sino de conjunto».

Y cerró: «La síntesis que construyó la CGT de ser parte del 23, convocar a una movilizaicón multitudinaria el 1° de mayo y el paro del 9, está trazada en un plan de lucha que es el correcto. La estrategia que trazó la CGT es la correcta».

La UTEP será parte de todas las acciones de protesta contra Milei

Gramajo confirmó que entidad que conduce seguirá en la calle acompañando cada una de las protestas contra el Gobierno nacional. En primer instancia, será parte orgánicamente de la movilización del ámbito universitario, del próximo 23 de abril.

«Vamos a acompañar con mucha fuerza porque nuestro deber es acompañar y ser solidarios en cada una de las luchas de nuestro pueblo. La convocatoria del 1 de mayo (de la CGT) es muy importante y vamos a participar, como también vamos a adherir al paro del 9 de mayo», confirmó.

Y sentenció: «Está en juego el destino de nuestro país. Si Milei logra estabilizar el modelo económico en uno o dos años estamos hablando absolutamente de otra Argentina».