La Cámara Argentina de Prestadores de la Seguridad Social (CAPRESS) y la Cámara Argentina de Prestadores del Conurbano (CAPRESCO) expresaron públicamente su oposición al paro nacional que se desarrollará este jueves 22 por parte de la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina, que encabeza Héctor Daer.
Según señalaron, la medida gremial adoptada “pone en riesgo la atención de los pacientes impidiéndoles el acceso a la salud y agrava aún más la crisis imperante del sector”. Además, consideraron que la misma “no tiene fundamento ni sustento alguno” y destacaron la “grave situación” que atraviesa el sector.
En ese sentido, los empresarios señalaron que la problemática es consecuencia del porcentaje de inflación imperante, al aumento exorbitante y desmedido de insumos y medicamentos, productos descartables y oxígeno como así también honorarios médicos, guardias, proyección salarial (paritarias). También por la “absoluta desregulación de nuestros costos (medicamentos e insumos necesarios)”.
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Al respecto, las cámaras apuntaron contra el PAMI y el IOMA ya que “imponen valores prestacionales que no alcanzan y no cubren los aumentos necesarios”, lo que se suma al atraso en los pagos, los cuales se efectúan a más de 90 días de efectuada la prestación. Esta situación es considerada como “evidente, injusta y crónica”.
“No estamos en condiciones de afrontar ningún tipo de aumento ni bono más”, enfatizaron en el comunicado, ya que todavía se encuentran pagando cuotas de la renegociación del bono anterior, por lo que sería “inviable” aplicar uno nuevo. Sin embargo, destacaron la “loable labor del gremio de la sanidad”.
Por último, los empresarios concluyeron que “el problema es de qué manera se financia el sector y nosotros los prestadores no podemos resolver esta situación y no podemos cargar con más costos para funcionar”.