La Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre) y el Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores (Renatre) confirmaron ayer la detención de cinco personas tras constatar “una grave situación de explotación laboral”.
Las entidades lideradas por Ramón Ayala continúan su trabajo de relevamiento en distintos campos del país. En este caso, hallaron irregularidades y situaciones de explotación laboral en la localidad de Cañuelas, tras tres allanamientos, donde detuvieron a cinco personas.
“Continúan las tareas de combate permanente para la erradicación de situaciones de violencia en perjuicio de los trabajadores rurales y sus familias”, sostuvo Ayala. La causa penal presentada por explotación fue radicada en el juzgado federal número 2 de Lomas de Zamora.
Las fiscalizaciones se realizaron en establecimientos de la empresa Supremo S.A., de Carlos Felipe Fernández, dedicada a la actividad avícola, en los que fueron detectados 31 trabajadores “en situación irregular”, en colaboración con los funcionarios de la Secretaría de Trabajo de la Nación, la cartera laboral bonaerense y la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT), que hallaron “condiciones infrahumanas y de peligro para la salud”.
“El alerta se produjo en el hospital de esa ciudad bonaerense luego de detectar un caso mortal de hantavirus en una trabajadora avícola, y devino en fiscalizaciones, que exhibieron una delicada situación”, detalló el dirigente.
Las situaciones relevadas demostraron serios “riesgos de vida” en los trabajadores que allí se desempeñaban, por lo que hicieron que conste en las actas el escenario de vulnerabilidad y precarización laboral en dicho establecimiento. (Télam)