La Federación Argentina de la Industria Maderera y Afines (FAIMA) emitió un comunicado en el que pronunció respecto de la “crítica situación” que atraviesan las diferentes actividades del sector y que los ha obligado a tomar diferentes medidas de ajuste en las empresas. Sostienen el impacto será para la industria en general.
Según detallaron en el documento, el nivel de actividad de los aserraderos proveedores del mercado interno “han experimentado una disminución del 40% en su actividad en los últimos 60 días”, y que si bien la devaluación les dio “cierta competitividad” en el externo, el acelerado ritmo inflacionario “pone en peligro” la viabilidad de las exportaciones foresto-industriales.
En tanto, el sector de fabricación de tableros contrachapados sufrió una disminución de hasta el 45% en la producción, llegando al 60% en sectores especializados, mientras que en carpintería en obra y construcción con madera “se puede observar una caída del 25% en enero 2024”, producto de la suspensión de la obra pública.
Además, la recesión está impactando en el sector mueblero, viene con una reducción interanual del 24,6% en la producción de muebles y colchones a nivel nacional en enero de 2024, amenazado la continuidad de los 30.000 empleos directos y unos 15.000 en forma indirecta.
Por otra parte, la FAIMA también alertó sobre los incrementos observados en la importación de muebles durante enero pasado, donde se observa que algunas partidas arancelarias presentan un aumento de hasta el 191% en términos interanuales.
“Esta situación sumada a la caída de la demanda mencionada anteriormente, ya está generando reducciones en las jornadas laborales, adelanto de vacaciones, suspensiones y la posibilidad inminente de despidos masivos en las empresas locales”, describieron los empresarios, quienes recordaron que siguen con problemas para importar insumos por falta de divisas.
Para finalizar, la Federación consideró “imperativo” que se convoque al diálogo con el fin de «buscar planes de acción que permitan resolver esta crítica situación que pone en riesgo no solo a la industria maderera en particular, sino a la industria nacional en general”.