Uno de los líderes de CGT repudió la quita de aranceles y reclamó un plenario nacional del peronismo

El co secretario general de la CGT, Octavio Argüello, repudió la decisión del gobierno nacional de eliminar los aranceles de importación de teléfonos celulares y productos electrónicos y demandó la convocatoria a un «gran plenario nacional» del Partido Justicialista.

El dirigente de Camioneros, del riñón de Hugo Moyano, fue categórico en defensa del empleo industrial en Tierra del Fuego, la provincia más afectada por la política importadora anunciada por el gobierno de Javier Milei.

“La industria no es nada más que la máquina, la tecnología y el capital. También, son los trabajadores y no se puede dejar de contemplar su situación”, reflexionó Argüello.

En diálogo con el portal El1, el co titular de la CGT aseguró que el gobierno libertario persigue «un modelo muy similar al de los noventas». «En los ’90, el modelo neoliberal era fuerte, pero este es mucho más profundo. Volvemos a la desocupación, a la importación, a no generar trabajo”, lamentó.

“Ese modelo fue el que nos dejó más de un 20 por ciento de desocupación”, insistió, aseguró que “no quieren que haya ningún derecho, ninguna forma de defensa de los trabajadores”.

De ese modo, advirtió que “se trata de un Gobierno con cero sensibilidad”. “Nunca lo escuché hablar de crear políticas que desarrollen trabajo genuino, pero sí de finanzas, actividad financiera y libertad de mercado”, criticó.

Con extensa militancia en las filas del peronismo, el sindicalista de Camioneros criticó el presente del Partido Justicialista y llamó a trabajar en un programa con proyección nacional: «O el modelo que presentaron es muy bueno o nosotros somos muy malos que no podemos alcanzar una alternativa política y un camino”, opinó.

“Tienen que producirse cambios dentro de la estructura partidaria. Debería haber un gran plenario nacional del Partido Justicialista donde podamos plantear fuertemente esta situación porque no hay peor enfermo que el que no reconoce su enfermedad”, sostuvo.

Arguello demandó «un debate político, nacional y sincero, que no sea solo para la foto». “Cuando uno va a los encuentros del peronismo, parece que va a una sesión de psicología grupal”, criticó.