Se propuso la creación de un poder sindical regional, con un programa de crecimiento sindical que apoya a los sindicatos y la negociación colectiva.
Se desarrolló en la Ciudad de Buenos Aires y contó con 280 delegados.
Así lo determinó un estudio global realizado por UNI Global Union y la Confederación Sindical Internacional (CSI). Lo siguen Austria, Suecia, Francia y España.
El triunviro de la CGT fue elegido por unanimidad para encabezar la regional americana que nuclea a cientos de organizaciones del mundo de los servicios.