Sanidad tildó de «injusta» la conciliación obligatoria y avisó que «el plan de lucha no terminó»

La Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad (FATSA) acató la conciliación obligatoria por quince días en el conflicto que mantienen con las empresas por aumento salarial, aunque calificó la decisión de «injusta y desproporcionada».

La organización que conducen Carlos West Ocampo y Héctor Daer suspendieron los paros de 4 horas por turno programados para este jueves y viernes, y le exigieron al ministerio de Trabajo la convocatoria a urgente a audiencia.

«Reclamamos al Señor Ministro de Trabajo a que inste con el mismo rigor legal a los empresarios a negociar de buena fe y aplique las sanciones que corresponden a quienes se nieguen a negociar», enfatizó la FATSA en un comunicado.

Para los gremios de la Sanidad, el único sentido que puede tener el período de conciliación obligatoria es buscar las soluciones necesarias para alcanzar un acuerdo paritario.

Por eso, exhortaron al ministro de Trabajo Claudio Moroni a «que los convoque a las audiencias que resulten necesarias» y anticiparon: «el plan de lucha no terminó, sólo aceptamos postergarlo unos días para seguir negociando en procura del aumento salarial».

El conflicto entre la FATSA y las cámaras empresarias que nuclean a los prestadores de salud comenzó semanas atrás cuando el sector patronal pidió ante Trabajo la suspensión de las paritarias aduciendo graves problemas financieros para afrontar subas salariales.

Desde ese momento y ante la falta de propuesta paritaria, la organización sindical lanzó un plan de lucha con movilizaciones, asambleas y el llamado a un paro de actividad que por el momento quedó sin efecto por la conciliación obligatoria dictada por la cartera laboral.