Los docentes porteños rechazaron el incremento salarial del 5% y el bono de 3.500 pesos otorgado por el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta.
Las subas fueron dispuestas en forma unilateral por el Ejecutivo tras fracasar la negociación paritaria con los gremios.
Con este nuevo aumento, el porcentaje anualizado llega al 35%, a lo que sumará un bono extraordinario, no remunerativo, de 3.500 pesos para los docentes de jornada simple, pagaderos en dos cuotas, en enero y febrero.
El año terminará con un salario inicial testigo, por jornada simple, de 19.197,91 pesos, mientras que el correspondiente a jornada completa -también inicial y testigo, es decir, sin contar la antigüedad- será de 38.925 pesos.
«El incremento del 35% que se cobrará con el sueldo de diciembre no alcanza ni siquiera el 36% de inflación que reconoce el mismo IPCBA para el período febrero-octubre», destacaron desde la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE).
Desde el sindicato aseguraron que para recuperar la pérdida de poder adquisitivo, cualquier aumento «debería estar en el orden del 45% ya que al 36 alcanzado en octubre debiéramos sumarle la inflación de noviembre y diciembre.
«Este 5 por ciento representa una suma de entre 700 y 900 pesos por cargo o 35 pesos por hora cátedra», señalaron.
Respecto al bono, reclamaron que también alcance a los docentes de gestión privada.