Pulverizado: Así se destruyó el salario de los estatales bonaerenses

Los últimos tres años fueron criminales para el bolsillo de los trabajadores estatales, con una caída acumulada en los salarios del 40,9%. Los números espantan.

El cierre del gobierno de María Eugenia Vidal fue fatal. El 2018 fue el año de quiebre.

Con una inflación anual del 47,6%, según datos del INDEC, los sueldos de los agentes públicos bonaerenses apenas subieron un 32% más un bono de 7.000 pesos otorgado a fin de año.

Ese año la caída fue del 15,6%. Lo más optimistas hablan de una pérdida cercana al 8%, teniendo en cuenta el plus navideño. Lo concreto: el derrumbe fue significativo.

Pero la cosa no terminó ahí. En 2019 el deterioro salarial se acentuó: con aumentos promedio del 28,5% y una inflación anual del 53,8%. Fueron más de 25 los puntos porcentuales perdidos en el último año de Vidal.

REAPERTURA. Este miércoles se retomó la negociación salarial por la Ley 10430.

2018. El aumento inicial fue del 15% en tres tramos: 7% en enero, 4% en mayo y 4% en septiembre. La última cuota se adelantó a julio y luego de acordaron nuevas subas hasta llegar al 32% a final de año, más el bono de 7.000 pesos.

2019. La pauta anual fue anunciada en noviembre del año anterior. Vidal otorgó un aumento del 20% (4% en enero, 4% en marzo, 4% en mayo, 4% en julio, 2% septiembre y 2% noviembre) con instancias de readecuación en función de la inflación, llegando a diciembre con un incremento del 28,5%.

2020. La gestión de Axel Kicillof comenzó con diálogo pero sin acuerdos. El gobernador no logró entendimiento con los gremios y el aumento salió por decreto. Se trató de una suma fija de 4.000 pesos a cuenta de la paritaria (3.000 pesos a partir de febrero y 1.000 pesos a partir de marzo).

En porcentaje, se estima un incremento del 16% en el salario de bolsillo, por debajo de los 18,9% de inflación acumulada hasta agosto, según el INDEC.

Con el aumento de marzo, un salario de bolsillo (categoría 5, Régimen 30 horas, Ley 10430) es de 23.878 pesos, sin bonificaciones sectoriales ni asignaciones familiares. La canasta básica a agosto es de 44.521 pesos.

En este panorama oscuro y una pandemia que golpeó fuerte en las arcas provinciales, el gobierno de Kicillof afronta la reapertura salarial.