Los gremios estatales de Mendoza iniciaron este jueves la negociación paritaria con la gestión provincial al mando del gobernador Rodolfo Suárez.
El Ejecutivo ofreció un incremento promedio del 46% en seis cuotas más el pago de una suma final anual no remunerativa de $115.600 -conforme al presentismo- y una cláusula de revisión en noviembre.
Se planteó un esquema mixto de subas: aquellos agentes que perciban salarios más bajos recibirán un incremento total mayor que aquellos de salarios más elevados, alcanzando 50% para los salarios más bajos y 41% para los salarios más altos.
Funcionarios del gobierno de Mendoza en el inicio de la paritaria estatal
La oferta fue rechazada por la conducción sindical que pretende una suba del 55%, aumentos retroactivo a enero y el pase a planta de contratados, entre otros puntos.
La propuesta del gobierno establecía un incremento salarial pagadero en seis cuotas según el siguiente cronograma:
16% a partir de marzo de 2022.
5% a partir de julio de 2022
5% a partir de agosto de 2022.
5% a partir de septiembre de 2022.
5% a partir de octubre de 2022.
4% a partir de noviembre de 2022.
Pero recibió el rechazo de UPCN, ATE, la APEL y otros gremios que participaron en la primera mesa de discusión con funcionarios del gobierno mendocino.
La seccional UPCN de Mendoza reclamó «un aumento mayor al básico y no bonos en negro», ajustando los salarios del 2022 «según la pérdida real del salario y de acuerdo a la inflación de los dos últimos años».
Roberto Macho, titular de ATE Mendoza, explicó que la oferta «fue del 40% en cuotas, con bonos en negro que llegan hasta los $12.000 en el mes de diciembre de 2022».
«Lo consideramos totalmente insuficiente, fuera de la realidad en sí misma. Sabemos que la inflación calculada para este año va estar superando ampliamente el 50%, por eso desde ATE solicitamos un aumento salarial superior al 55%», declaró.
Las partes volverán a reunirse en mesa técnica el próximo 2 de marzo para acercar posiciones e intentar avanzar en una acuerdo.