El sindicalista Leonardo Fabre, titular de uno de los gremios de la ANSES, se ubicó una vez más en el centro de la escena gremial con un fuerte agravio al ministro de Economía, Sergio Massa, a quien calificó de «chanta» por la reciente decisión sobre el Impuesto a las Ganancias.
Con una crítica «descolgada» dentro del mundo sindical, Fabre sumó nuevos reproches en el entorno de los dirigentes gremiales, y ya marginado de la estructura de CGT y sin rumbo político tras el fracaso electoral integrando la fórmula presidencial con Guillermo Moreno en las PASO.
Los diferentes posicionamientos políticos de Fabre llevaron a su sindicato, la Asociación del Personal de los Organismos de Previsión Social (APOPS), a una situación de deterioro en representatividad, con caída de afiliados y protagonismo.
La irreverente postura del sindicalista se configuró en un derrumbe en la representatividad que la APOPS supo tener, hoy en manos de otros sindicatos con presencia en el organismo, como UPCN, ATE y el sindicato SECASFPI, a consecuencia de las jugadas de Fabre.
La reciente crítica a Massa por Ganancias («Los trabajadores de ANSES seguiremos pagando Ganancias. (…) Sergio seguís siendo el mismo chanta de siempre, sos el mal menor en estas elecciones») ubica a Fabre en soledad y lejos del resto del sindicalismo que apoyó y celebró la «victoria histórica», como calificó la CGT.
Sin influencia en ANSES ni consenso en su sindicato y con el fracaso electoral junto a Moreno, el dirigente despertó dudas entre colegas, quienes por lo bajo se preguntan si el ataque a Massa podría representar un acercamiento al libertario Javier Milei. En lo que sería, tal vez, su última carta.
«En ANSES no tiene peso, cayó en afiliados y se le achicó la comisión directiva. En política fracasó. Está acabado. El salto a Milei es lo único que le queda», sintentizó un dirigente del sector ante la consulta de Mundo Gremial.