La paritaria de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) parecía transitar un camino de paz tras el acuerdo alcanzado por el gremio con funcionarios del gobierno, que establecía un incremento en los sueldos del 31% por los seis primeros meses del año. Pero en las últimas semanas la situación de empantanó del lado del sector empresario, y otra vez la disputa por los subsidios pone en peligro al transporte público de pasajeros.
La UTA cierra un aumento del 31% por seis meses y marca el rumbo de las paritarias 2023
El sindicato que conduce Roberto Fernández aguarda con expectativa la audiencia del próximo viernes. Se trata de una reunión clave que fue postergándose a lo largo de la semana, para evitar otro fracaso. Se viven horas decisivas en las que están en juego no solo las mejoras salariales de los choferes sino el normal funcionamiento de las líneas de colectivos ante la posibilidad latente de un inicio de conflicto en caso de no haber acuerdo.
Las diferencias (millonarias) entre el gobierno y las cámaras empresarias del transporte por el giro de subsidios es hoy el principal escollo para el entendimiento. A los empresarios los números del ministerio de Economía no le cierran y presionan por más.
La cartera que conduce Sergio Massa ofreció a las patronales del transporte un adicional mensual de $5.000 millones para el primer semestre, lejos de las pretensiones empresariales que exigen una recomposciión de $27.000 millones, según transcendió, para afrontar los recientes aumentos en los costos en el sector.
En caso de concretarse el acuerdo, los choferes de colectivos del AMBA percibirán un aumento en tres tramos: 10% desde enero, 10% desde marzo y 7% desde mayo, que por el carácter acumulativo de los porcentajes representa un 31% de incremento.
Se trataría del primer gran acuerdo paritario del año en torno a la pauta salarial del 60% anual impulsada por los ministerios de Economía y Trabajo, en el marco de los acuerdos colectivos entre precios y salarios que el gobierno buscará llevar adelante en 2023 para contener una suba disparada de la inflación.
La oficialización de la paritaria de colectiveros del AMBA abriría la puerta para los entendimientos en larga distancia e interior.