ANÁLISIS Y OPINIÓN
La desdibujada reaparición de Pablo Moyano
El sindicalista volvió a escena tras semanas en soledad y de silencio absoluto. Las diferencias en el seno del moyanismo siguen intactas y un hecho registrado este lunes podría leerse como una relación a un paso de la ruptura total. Pablo convocó a marchar por el Día de la Memoria, pero lo hizo sólo con columna propia, alejado de la tropa oficial de Camioneros. Cuando llegó su padre, él desconcentró.

El consejo directivo nacional de la CGT anunció hace días la reactivación del plan de lucha contra el gobierno de Javier Milei y logró rápidamente encolumnar a las bases gremiales, que en unidad irán al paro general contra la gestión libertaria.
El nuevo marco de disputa contra el Gobierno propició la reaparición en escena de referentes y dirigentes sindicales críticos a la conducción cegetista, que ahora se suben a la medida para renovar cuestionamientos. Entre ellos, el camionero Pablo Moyano quien tras su renuncia a la CGT había optado por el silencio y el corrimiento de la escena gremial.
«Con la política tan agresiva que ha llevado este Gobierno, no tendría que haber habido 3 paros, tendría que haber habido 10», señaló Moyano en declaraciones radiales.
🗣️ «LAS POLÍTICAS DE ESTE GOBIERNO SON TAN AGRESIVAS QUE TENDRÍA QUE HABER HABIDO 10 PAROS»
Pablo Moyano, secretario adjunto de Camioneros, con @sietecase en #LIM https://t.co/i0tCfrcdpd pic.twitter.com/upKKpBGbTP
— Radio Con Vos 89.9 (@radioconvos899) March 21, 2025
Moyano hijo dejó su cargo en el triunvirato y quedó sólo. Ninguno de sus hasta entonces alfiles dentro del Consejo Directivo siguió sus pasos y su presencia en las primeras líneas de decisión se diluyó por completo.
El adjunto de Camioneros había impulsado una medida general a fines de 2024, pero no logró consensos ni apoyos. El derrotero del dirigente tuvo continuidad al interior de la organización camionera y en el seno del peronismo.
En Camioneros siguió desde un costado los acuerdos salariales a la baja y los entendimientos con el Gobierno. A pesar de ello, al gremio no renunció. A la vista de Pablo Moyano, Camioneros cerró dos acuerdos trimestrales por debajo de la inflación y no existió plan de lucha ni medidas sectoriales. ¿Necesitaba de CGT para hacerlo? No.
El cortocircuito interno en la familia sigue firme. Un dato que describe una relación al borde de la ruptura se registró esta tarde en la movilización por el 24M, donde Pablo Moyano le fue a marcar la cancha al padre, con una columna propia alejado de la tropa oficial de Camioneros donde participó Hugo Moyano.
En el seno del peronismo también perdió. La decisión de hibernar en silencio lo dejó afuera de las decisiones del PJ de Cristina, y fueron otros los que aprovecharon los vínculos y espacios.
Ahora el sindicalista de camioneros esperó el momento. Dejó mover a la CGT y reapareció. Desdibujado y sin poder interno, busca redoblar la apuesta. Pero en la central sindical, donde «nunca dejó de ser el hijo de Hugo», entienden que las declaraciones recientes no suman y sólo refuerzan el proceso de desgaste cegetista propiciado, mayoritariamente, por los sectores de la izquierda.
