En medio del debate interno que vive el Frente de Todos por la dura derrota electoral en los comicios, los principales dirigentes de la CGT se vuelven a reunir mañana para hacer un balance de la jornada electoral y confirmar si finalmente se llevará adelante la marcha del 18 de octubre para conmemorar el Día de la Lealtad.
Es que el cimbronazo del cachetazo electoral también interpeló a los dirigentes sindicales, más allá del apoyo explícito al Presidente que le dio Antonio Caló (UOM) el lunes en el primer acto oficial después del traspié del oficialismo.
Mañana, a las 15.30, la «mesa chica ampliada» de la CGT se reunirá en la sede la UOCRA para analizar este y otros temas. «Está en marcha» la movilización con organizaciones sociales, destacó un jefe gremial consultado, intentando dejar atrás las versiones sobre una posible suspensión por el cambio de ánimo que reflejaron los comicios del último domingo.
Lo que no está confirmado es que la medida sea en apoyo al jefe de estado y al proyecto político de «Todos». Varios referentes de peso de la entidad sostienen que tienen que ser «una marcha de los trabajadores» por la producción y el trabajo y por eso no habría discursos públicos sino solo la lectura de un comunicado conjunto.
Con todo, se estima que el temario va a ser amplio: la organización del comité central confederal del 22 de septiembre y el análisis sobre los resultados electorales y la sempiterna situación de las obras sociales, seguramente serán parte del convite.
Las miradas estarán puestas en el Confederal, que es la instancia previa a la convocatoria del congreso nacional de la institución que elegirá a la nueva conducción cegetista el 11 de noviembre, en Parque Norte. Sólo 3 días antes de las elecciones generales que definirá el rumbo de la Casa Rosada en lo que resta del mandato de Alberto Fernández.
Esta tarde estuvo por Balcarce 50 uno de los integrantes de la mesa chica cegetista: Andrés Rodríguez (UPCN) se habría reunido con Gustavo Beliz para analizar las próximas mesas del Consejo Económico y Social que monitorea el enigmático secretario de Asuntos Estratégicos.