A fines del mes de febrero la planta automotriz de Honda, ubicada en Campana, suspenderá al personal debido a la caída de las ventas en motocicletas y automóviles; los operarios cobrarán el 70% de sus salarios.
El Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata), Zarate, había advertido, a principios de octubre, que la planta Honda en Campana se encontraba atravesando un escenario complicado.
“Acordamos en el último trimestre del año, para octubre, noviembre y diciembre, una semana de suspensión para cada mes en virtud de que había un sobre de stock de motocicletas y de automóviles. Se producía pero no había ventas”, señaló específicamente el delegado general de Smata, Diego Yaquemet.
Honda emplea 1300 trabajadores en total de los cuales 900 son operarios, la gran mayoría pertenecientes al gremio de Smata. Estos se vieron afectados por diferentes suspensiones planteadas por la empresa a raíz de la poca productividad desde la segunda mitad del año.
“De nuestra parte siempre buscamos preservar las fuentes de trabajo y en este caso mantenemos un dialogo fluido con la empresa en función de ello”, aseguró Yaquemet .