ANÁLISIS Y OPINIÓN
Gremios opositores preparan nuevo paro general
La CTA que lidera Pablo Micheli volverá a marchar este miércoles al Congreso en protesta contra el impuesto a las Ganancias y las recientes suspensiones y despidos en fábricas, mientras comienza a definir un paro general junto a la CGT Azopardo y la CGT Azul y Blanca, para la primera quincena de agosto.

De esta forma, con el Mundial de Fútbol ya concluido, el sindicalismo opositor vuelve a meter presión al Gobierno para conseguir respuestas a los reclamos de la agenda que incluso comparten con las vertientes del gremialismo más afines a la Casa Rosada.
Los referentes y afiliados de la CTA michelista se concentrarán desde las 15.00 en la esquina de la Avenida de Mayo y 9 de Julio y desde allí marcharán hacia la Plaza del Congresos, donde se realizará un acto.
Por su parte, la CGT Azopardo de Hugo Moyano manifestó su respaldo a la movilización de este miércoles al Congreso de la CTA y no se descarta la presencia de algún dirigente moyanista y de afiliados de gremios de esa central en la marcha michelista.
A su vez, sindicalistas del moyanismo consultados por NA ratificaron que el paro nacional de las tres centrales opositoras se concretaría en los primeros quince días de agosto, una vez que finalicen las vacaciones de invierno.
Durante la protesta, los dirigentes de esta CTA reclamarán la «eliminación del impuesto a las ganancias»; «el cese de los despidos y suspensiones»; «aumento salarial, de todos los planes sociales y jubilaciones acordes a la inflación»; «82 por ciento móvil para los jubilados»; «derogación de la ley antiterrorista»; y «suspensión del pago de la deuda externa».
Por otra parte, Micheli confirmó la realización de un nuevo paro nacional de actividades para la primera quincena del mes próximo, en conjunto con la CGT de Moyano y la CGT de Luis Barrionuevo, como los que concretaron el 20 de noviembre de 2012 y el 10 de abril de este año.
«Durante el Mundial no tenía sentido, pero la situación amerita que vayamos a un paro nuevamente, por la gravedad de la situación que esta peor y no tiende a normalizarse», manifestó el líder de la CTA opositora, en declaraciones a radio Rivadavia.
«Cada vez hay más suspensiones y más despidos, agravado porque aquellos que no quieren abandonar su única fuente de ingreso se ven impedidos porque la Gendarmería custodia las fábricas para que los trabajadores no puedan ingresar», añadió.
Entre las razones que justifican la realización del cese de actividades Micheli enumeró al impuesto a las ganancias sobre el salario, ingresos medios muy bajos que no alcanzan a cubrir la canasta familiar, y «los jubilados que están cada vez peor».
«Todo esto hace un cuadro que nos lleva a reiterar que el paro, convocado por las CGT y la CTA, va a ser durante la primera quincena de agosto», aseguró el secretario general.
