ANÁLISIS Y OPINIÓN
Godoy: «Fuimos el blanco de las políticas de ajuste y saqueo que aplicó el macrismo»
(Elecciones ATE) – El dirigente es actualmente el secretario general de ATE Nacional y buscará renovar su mandato por cuatro años más.
Hugo «Cachorro» Godoy es el actual secretario general de ATE Nacional y el próximo miércoles 7 irá por la reelección al frente de la Lista Verde.
Con 64 años de edad, buscará renovar el máximo cargo de la institución acompañado con Rodolfo Aguiar como candidato a secretario general adjunto.
- Última dependencia estatal en la que trabajó: Trabajo administrativo y coordinando la organización del Centro de Jubilados de la Provincia de Buenos Aires bajo la órbita del Ministerio de Desarrollo Social de la Provincia de Buenos Aires.
- Período: Entró a trabajar en el Estado provincial en 1985 en lo que era ese momento el ministerio de Acción Social, primero en el área de Niñez y posteriomente lo pasaron al área de tercera edad. Aún sigue siendo parte de la Dirección de la Tercera Edad.
- Inicios en el gremialismo: Mi primera experiencia gremial, sin ser delegado, fue en el matadero de Abasto, en la ciudad de La Plata, allá por el año 74, a fines de desde año, donde ingrese a trabajar en ese frigorífico que era el matadero municipal siendo parte de la juventud trabajadora peronista. Tuve mi primera Licencia gremial en el año 91 cuando asumí la Pro Secretaría gremial, de ATE Provincia de Buenos Aires, cuando se constituyó la ATE provincial y asumimos la conducción después de esa elección.
¿Mejoró la calidad del empleo público en la gestión Cambiemos?
No, al contrario, fue agredida, agraviada y no se avanzó en nada en cuanto al mayor problema que tiene la administración central que es la precariedad laboral. Sufrimos despidos masivos y retraso salarial, así que no se avanzó en nada. Por el contrario fuimos el blanco de las políticas de ajuste y saqueo que aplicó el macrismo en estos 4 años.
¿Qué consiguió en esta gestión que termina y qué autocrítica hace de la misma?
ATE es un gremio nacional, que agrupa a trabajadores del Estado nacional, a los provinciales y municipales. Como uno de los objetivos principales que se han avanzado en muchas provincias y municipios es el pase a planta permanente de trabajadores precarizados, pudimos reincorporar en provincias y municipios a la mayoría de los trabajadores despedidos, cosa que fue más difícil en el Estado nacional. ATE ha crecido mucho en organización: hemos pasado de 250.000 afiliados a más de 300.000 y hemos crecido en organización territorial, pasando de los 800 municipios que teníamos hace 4 años a los 1.300 al día de hoy. Además, éramos 150 seccionales y hoy estamos convocando a elecciones en 180 seccionales en todo el país y hemos dado capacidad de respuesta de nuestro gremio para discutir una perspectiva de estado diferente a este estado neoliberal que ha instalado Macri y el FMI en la Argentina y que necesariamente debemos cambiar. En definitiva hemos crecido cuantitativa y cualitativamente como gremio.
Queda pendiente que el Estado se democratice más y que el derecho al Convenio Colectivo de Trabajo se alcance en todas las provincias y municipios; y que avance en la nacionalización de algunos CCT fundamentalmente las áreas de educación y Salud para que se nacionalicen estas políticas y profundicemos la idea del objetivo «igual trabajo igual remuneración», que es un derecho estatal que hoy no se cumple porque los Consejos Federales no integran la opinión de los trabajadores para discutir las políticas estatales en todo los ámbitos, nacional provincial y municipal.
Mencione tres propuestas que llevaría adelante en caso de ser reelegido secretario general
Como gremio profundizar la tarea de reinventar ATE, creciendo en organización territorial. Después avanzar hacia la creación de las 300 seccionales de nuestro gremio en todo el territorio nacional, con el objetivo estratégico es que en cada municipio haya una seccional de ATE. Avanzar en modificar el Estatuto para profundizar la democracia interna, la descentralización, la organización territorial y el fortalecimiento de los cuerpos de delegados, con el objetivo de llegar a los 400.000 afiliados en el corto plazo.
En el plano de los derechos de los trabajadores estatales nuestros objetivos principales, y es lo que le vamos a plantear al futuro gobierno que asuma después de octubre, vencido Macri y el plan del FMI, serán: la reincorporación de los trabajadores despedidos, restablecimiento de los programas de gobierno que tenían que ver con las necesidades de los sectores populares y en estos cuatro años fueron recortados y desfinanciados o vaciados. Finalmente la anulación del CCT trucho que firmó hace 15 días Macri con su gremio amigo, UPCN, y por el cual establecen estabilidad laboral por los próximos 5 años a 2.500 funcionarios jerárquicos del Estado, a los que se les elevan los sueldos de 150.000 a 250.00 pesos en algunos casos y se los instala con la intención de perpetuarlos y ser la traba que les pongan a las políticas de reparación que puedan desarrollarse en un futuro gobierno.
En esta nueva gestión, ¿usted trabajaría para que las CTA se unifiquen?
La unidad de los trabajadores necesariamente tiene que pasar por un proceso de construir un nuevo modelo sindical en la Argentina basado en la democracia y la libertad sindical, esto quiere decir en primer lugar integrar a organizaciones de trabajadores que se han desarrollado en los barrios en las cooperativas, trabajadores desocupados, movimientos de jubilados, movimientos de mujeres de inquilinos, que son trabajadoras y trabajadores que hoy están por fuera del esquema legal sindical vigente, y que necesariamente requiere incorporarlos en una nueva centralidad de la clase trabajadora. Desde la CTA-A vamos a trabajar para eso, articulando con aquellas organizaciones de movimientos de trabajadores que estén dispuestos a llevar adelante esta perspectiva. En se sentido habrá que ver quienes están dispuesto a ser parte de esto y no tenemos ninguna duda: unidad en la lucha, unidad de construcción de un nuevo modelo sindical y fortalecimiento de las nuevas organizaciones que van emergiendo en un escenario político donde sin ninguna duda habrá un realineamiento del movimiento de trabajadores donde la CTA-A será parte.
¿Cuál es su posición respecto a las versiones que indican que la CTA de los Trabajadores quisiera volver a la CGT?
Están en todo su derecho a decidir. Es una organización que tiene sus propios ámbitos de discusión y decisión. Nosotros como CTA-A no estamos de acuerdo con ese. Pensamos que la CGT es una estructura de organización caduca y que necesariamente el proceso de unidad tiene que pasar por el debate del que hacía referencia antes para que la unidad sea una unidad fructífera y no simplemente un corte y pegue de siglas o un acuerdo entre un grupo pequeño de dirigentes.
¿Puede mencionar cuál es su candidato a presidente y por qué?
ATE como tal no ha definido candidatura porque respetamos la opinión de los más de 300.000 afiliados que hay en nuestro gremio, donde seguramente hay distintas opiniones. En términos personales soy parte de un partido, de Unidad Popular, que forma parte del Frente de Todos, y que está apoyando la candidatura de Alberto Fernández en las próximas elecciones y creo que es una perspectiva electoral que puede canalizar la búsqueda de un nuevo tiempo de esperanza para nuestro pueblo.
La CGT es peronista en cualquiera de sus versiones, las CTA están alineadas al kirchnerismo: ¿se puede hacer política gremial al estar tan emparentados con un espacio político?
En el movimiento de trabajadores hay en general, sin ninguna duda, una cultura peronista que es fuertemente predominante que está en crisis de representatividad porque tiene diversas expresiones, tanto en el plano político como sindical. También hay corrientes que se han alimentado en las izquierdas tradicionales como la doctrinariamente marxista o trotskista o bien las nuevas izquierdas. Tampoco hay que descartar la provenientes de la cultura irigoyenista. Sin ninguna duda desde siempre el movimiento de trabajadores ha estado vinculado a estas corrientes de pensamiento tanto filosófico como de pensamiento político, porque la clase trabajadora ha sido un promotor de nuevos conceptos y de ideas renovadoras alternativas al sistema capitalista. Y no tengo ninguna duda de que si no existieran estas ideas el movimiento de trabajadores estaría sin rumbo sin horizonte.
El pensamiento político es lo que alimenta la construcción de estrategias que tengan que ver con los intereses de la clase trabajadora y la construcción de una sociedad alternativa al capitalismo. Esto no implica exclusividad de la representación partidaria porque evidentemente un mosaico de representación partidaria tan disperso y tan en crisis de representatividad como el que seguimos teniendo en la Argentina, la necesidad del pensamiento autónomo y de la clase trabajadora para aportar a la reconstitución de una estrategia unificada para los sectores populares es un elemento necesario y fundamental.