Para evitar un conflicto con gremios que considera aliados, el gobierno estaría dispuesto a reabrir la paritaria 2021 a causa de la disparada inflacionaria del primer trimestre del año que hizo perder poder adquisitivo a los estatales nacionales. La actual negociación colectiva finaliza el próximo 31 de mayo.
Es probable que la semana próxima comiencen las primeras reuniones entre funcionarios de Jefatura de Gabinete, como la secretaria de Empleo, Ana Castellani, y dirigentes de UPCN y ATE. El titular de último gremio, Hugo «Cachorro» Godoy había reclamado días atrás rediscutir la actual paritaria por la espiralización de precios de los últimos meses antes que concentrarse en la negociación sectorial del período 2022-2023.
Es que en primer término las partes habían coincidido en adelantar la paritaria 2022.
Lo cierto es que ahora en el gobierno están dispuestos a discutir una cuota de «refuerzo» por las subas que ha registrado el Índice de Precios al Consumidor (IPC) que, en lo que va del año, trepó al 16,1%.
Según se pudo averiguar, funcionarios de Jefatura de Gabinete, Trabajo y Economía evalúan qué esfuerzo fiscal debería llevar adelante el estado para cumplir con dicha meta. En principio, no se pagaría un bono porque, al entender de los popes de la cartera laboral, «achata la pirámide» salarial de los trabajadores estatales nacionales.
En el oficialismo aseguran que en paralelo las partes también se abocarán a debatir la paritaria 2022 porque, de acuerdo a las primeras previsiones, la primera cuota de la nueva negociación debería comenzar a pagarse con los sueldos de junio próximo.