La conmemoración por el Día de San Cayetano del pasado miércoles, se vivió en los municipios del conurbano bonaerense, dónde la CGT regional Avellaneda-Lanús realizó una misa, a la par de la peregrinación de los movimientos sociales y las centrales obreras, desde la Iglesia del patrono ubicada en Liniers a Plaza de Mayo.
La misa se celebró en la localidad de Monte Chingolo, ubicada en Lanús Este y fue llevada adelante por el Obispo de la Diócesis, Marcelo Margni, quien fue convocado por la Regional de la CGT.
Entre quienes asistieron a la misa estuvieron el secretario general de la regional de la CGT, Sergio Jerez, así como el propio Obispo y más de 600 trabajadores de gremios 40 gremios entre los que se encontraban Camioneros, AEFIP, Calzado, SEIVARA, Seguros, Ceramistas y Panaderos, así como movimientos sociales agrupados en la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), con la presencia del titular de la organización, Alejandro Gramajo.
Margni leyó un documento elaborado por la CGT para culminar la homilía, el cual remarcó que “frente al sálvese quien pueda, nosotros decimos que nadie se salva solo. Y que no puede haber libertad sin justicia social”, indica el texto. Además de la lectura del documento, el Obispo bendijo un conjunto de herramientas de los trabajadores.
Desde la regional, destacaron, que en sintonía con la marcha organizada hacia Plaza de Mayo, en el conurbano bonaerense “también se escuchó fuerte el pedido por Paz, Pan, Tierra, Techo y Trabajo”.