Alejandro Amor, el doble agente

Si hay algo inexplicable, es la carrera supo constuir Alejandro Amor de la mano del PRO . No existe una etapa de su crecimiento que no esté ligada al acompañamiento amarillo.

Amor es el dirigente sindical que Horacio Rodríguez Larreta quiere como interlocutor con la CGT. Y esto tiene una simple explicación: llevan 16 años de construcción en conjunto.

Fue legislador de la Ciudad de Buenos Aires entre 2011 y 2013, cuando renunció a la banca y fue designado como Defensor del Pueblo porteño, cargo al que dimitió en 2021 para retornar al Sindicato Único de Trabajadores del Estado de la Ciudad de Buenos Aires (SUTECBA) que lidera Amadeo Genta y conducir la Obra Social de la Ciudad (ObSBA). También inició un nuevo mandato como legislador porteño por el Frente de Todos.

Desde lo sindical, SUTECBA fue la sociedad perfecta para una gestión que hizo del monotributismo el sistema de contratación y que se extendió a toda la administración pública.

Desde la obra social, la complicidad del descreme que se registró desde épocas de Mauricio Macri en la Ciudad hasta el día de la fecha. Amor asumió en el directorio y qué dijo sobre el tema: nada. Así es el servicio del que escapan los municipales. En la escuela de Genta, Alejandro es su máximo exponente.

En la Legislatura porteña, donde Amor se incorporó encabezando la lista del Frente de Todos en la Capital Federal tuvo su primera demostración de obediencia cuando vino el presupuesto de Larreta. ¿Qué cuestionó? No hace falta contarlo.

Lo llamativo de Amor, y que se puede leer como imposición a Genta, fue que lo acompañe como adjunto en las últimas elecciones del sindicato. Teniendo en cuenta la edad de Amadeo, es una sucesión cantada. Y para los Genta, Amor era alguien de quien desconfiar, por eso siempre le pagaron por afuera, y muy bien, como Defensor del Pueblo, por ejemplo. Pero de pronto en la última elección apareció en la tira y sorprendió a todos. ¿Quién se lo impuso a Genta? ¿Se lo pidieron desde la gestión? Algunos hablan de un agente doble, haciendo mención a la figura de la contrainteligencia.

Lo concreto es que en casi 8 años de gestión de Horacio Rodríguez Larreta los municipales de SUTECBA no hicieron un solo paro. No hay cuestionamiento, no hay medidas de fuerza.

Es una sociedad perfecta para la que sueña como presidente Larreta; tener un sindicalismo como el de Genta-Amor para una futura gestión en la que ya se empiezan a probar la camiseta.