Las conducciones de las CTA Autónoma y de los Trabajadores de la provincia de Buenos Aires aceitan la articulación para pulir la resistencia anti Milei y respaldar al gobernador Axel Kicillof, en el marco del contexto político y socioeconómico actual.
Respecto a lo que representaría el primer encuentro de ambas vertientes, Roberto Baradel, el secretario General de Suteba y secretario general de CTA bonaerense, reveló: «Hemos ido abordando nuestras diferencias para construir y avanzar en acuerdos sólidos que nos permitan fortalecer la unidad».
Y subrayó: «Tengo una inmensa alegría al ver como este proceso corona años de trabajo, iniciativas y actitudes firmes (…) Más allá de posicionamientos que tomamos en determinado momento histórico, y de los cuales nos hacemos cargo, es hora de sanar esas heridas y unir fuerzas«, alentó el referente de las y los docentes.
Considerando el escenario de ajuste que prima, producto de la embestida de Javier Milei, dijo que «la organización y la unidad son fundamentales. No hay lugar para mezquindades ni protagonismos».
Por eso, adelantaron que el próximo 16 de septiembre en un plenario conjunto de secretarios y secretarias generales de ambas centrales sindicales de la provincia, en la ciudad de La Plata, que culminará en el acompañamiento a la marcha por la «Noche de los lápices».
«Es tan importante el trabajo conjunto de la CTA-T, CTA-A, CGT y las organizaciones sociales», remarcó Baradel, y llamó a activar «las multisectoriales, esos espacios de debate y encuentro donde organizaciones sindicales, políticas y sociales, la iglesia, comerciantes, pymes y productores pueden participar».
Reforzando ese mensaje, el secretario General de la CTA Autónoma, Oscar «Colo» de Isasi sumó: «Este reencuentro de las dos mesas ejecutivas, nace del esfuerzo de construir unidad en la acción de las dos CTA, para procesar las diferencias de manera constructivas y de una voluntad de construir un camino común».
Bajo el paraguas de la conducción de Kicillof, concluyó: «En esta reunión se expresa no solo la voluntad de resistir, sino de protagonizar el proceso político».