El Secretario General de la Federación Gráfica Bonaerense, Héctor Amichetti, se mostró este lunes a favor de que el Gobierno otorgue una suma fija al conjunto de los trabajadores, y dijo que ese monto debería ser de «por lo menos 30.000 pesos».
Amichetti, una de las voces más fuertes de la Corriente Federal de los Trabajadores, suma presión al flamante superministro Sergio Massa y al ministerio de Trabajo sobre la posibilidad de pagar un aumento generalizado a los trabajadores privados, en discordancia con gran parte de la CGT que se oponen a la medida.
El dirigente dijo que «hay que levantar la capacidad de ingresos del pueblo trabajador y esto no anula la continuidad de la discusión libre de paritarias».
Coincidió así con lo expresado por otro integrante de la CGT, el secretario general adjunto de Camioneros Pablo Moyano, quien también había adelantado su postura a favor del otorgamiento de una suma fija.
«Yo, Pablo Moyano, no voy a impedir que un trabajador que tenga salario bajo tenga la posibilidad de cobrar un bono o una suma fija», había dicho el dirigente de los camioneros.
Pablo Moyano: “No voy a impedir que un trabajador que tenga sueldo bajo cobre un bono”
Amichetti, al ser consultado sobre las distintas posturas dentro de la CGT en torno a la concesión de este bono o suma fija dijo que hay sectores sindicales que «piensan que si se da un aumento por decreto se paraliza la paritaria y yo creo que no es contradictorio».
Y consideró en este sentido que si se da una suba fija, ésta «no puede ser absorbida por las paritarias».
Sobre cuál debería ser el monto de esta eventual suma fija, el sindicalista de los gráficos opinó que «ningún trabajador debería estar debajo de la la línea de la pobreza».
Y explicó que la suma fija «tendría que ser un monto importante, por lo menos 30.000 pesos, ya que con eso pondrías a algunos compañeros de las categorías más bajas con un piso de 104.000 pesos, que es lo que marca la línea de la pobreza».
En otro orden, Amichetti confirmó la movilización que organiza la CGT para el próximo 17 de agosto. «El viernes se hizo una reunión en la CGT con todos los sectores internos y se ratificó la marcha», afirmó.
Agregó que está previsto que la movilización una el Obelisco con el Congreso nacional y apuntó que «se está elaborando un documento y luego hay matices entre los distintos grupos» respecto de las consignas de la convocatoria.