Yasky advirtió que la reunión entre CGT y Gobierno “no conduce a ninguna parte”

El secretario general de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky, se refirió a la mesa de diálogo establecida entre una parte de la conducción nacional de la CGT y funcionarios del Gobierno que preside Javier Milei, y consideró que “no conduce a ninguna parte”. Además, remarcó como “necesario” el reagrupamiento de las dos centrales.

Con la ausencia del cotitular cegetista Pablo Moyano en la Casa Rosada, el legislador nacional de Unión por la Patria consideró que dicho encuentro “nos lleva a un callejón sin salida”. “Dialogar con un gobierno que va a vetar otra ley votada por el Congreso, que le quita los derechos que protegían al trabajador, es un ejercicio que no conduce a ninguna parte”, agregó.

Por estos motivos, Yasky criticó al ejecutivo nacional ya que “nos quieren mostrar que el ajuste es la única salida para el pueblo argentino” y manifestó que es necesario que “el pueblo sea capaz de confrontar”, por lo que completó que “no creemos que sea posible sin un movimiento sindical decidido a estar en la calle”.

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De este modo, el dirigente sindical aseguró que la primera reunión de las mesas nacionales de la CTA y la CTA Autónoma, de cara a la reunificación de ambas organizaciones, “es un hecho muy significativo” y que “es el inicio de un camino que va a fortalecer nuestra presencia en las luchas”, tal como indicó en diálogo con AM530 Somos Radio.

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Al respecto, el diputado nacional confirmó que la unidad formal de las centrales “ya está encarrilada” en algunas provincias mientras que “en otras aún quedan cuestiones por resolver”. “En la resistencia al gobierno de Macri empezamos a marchar juntos y el proceso se agotó con la unidad en la acción”, recordó.

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“Ahora es necesario el reagrupamiento de aquellos que consideramos que hay que ponerle un limite al ajuste, la reforma laboral y toda politica que quite derechos”, concluyó Yasky, que también confirmó la participación en la movilización de mañana en defensa de la educación pública y anticipó para noviembre una marcha federal contra el hambre.