Por estos días de reactivación económica post pandemia, las principales economías del mundo vuelven a rodar a pleno. Sin embargo está reactivación se estaría viendo limitada por un desajuste entre la demanda de trabajadores y la oferta en algunos rubros.
Entre los casos más resonados tenemos la demanda Europea de 400 mil camioneros. Así también se vive el fenómeno denominado la «Gran renuncia» que afecta desde EEUU a Italia donde miles de trabajadores de empleos de baja calificación y remuneración son abandonados de a miles.
Con este escenario como telón de fondo, los países de América del Norte retomaron este jueves en EEUU la reunión anual denominada «Tres amigos» donde sus presidentes ajustan la gobernanza del subcontinente.
Vale aclarar que estas reuniones no tuvieron lugar durante el gobierno de Donald Trump, periodo que coincidió con las negociaciones y firma del nuevo tratado de libre comercio ahora denominado T-MEC.
Ahora bien este jueves la agenda estuvo dominada por el control de las migraciones, cambio climático, covid-19 e integración comercial. En relación a las migraciones se avanzó en la implementación de un plan denominado » Sembrando oportunidades» de generación de empleo en los países del sur de México para atacar las causas de las migraciones.
El programa consiste en otorgar beneficios a pobladores para plantar árboles maderables y frutales. Sus cuatro pilares son: la inclusión productiva; el cuidado del medio ambiente; fomento de la cultura del ahorro y reconstruir el tejido social. De esta forma esperan que merme la cantidad de migraciones.
En relación a la recuperación de la industria automotriz y sus puestos de trabajo, EEUU existe un plan de incentivo fiscal para la producción de autos eléctricos que fue visto con malos ojos por sus socios al igual que las políticas del «Compré americano» por el marco proteccionismo.
Por su parte, aprovechando el escenario descrito más arriba, López Obrador acudió a la cumbre con la firme idea de defender una propuesta realizada en marzo de una visa para trabajadores invitados que podría beneficiar entre 600 mil y 800 mil mexicanos y centroamericanos anualmente.
La propuesta tiende a ordenar la migración ilegal, propondrá resucitar el programa Bracero, que funcionó entre los años 40 y 60, y que consistía en entregar visas temporales de trabajo para los migrantes mexicanos.
Cabe recordar que después de este programa para 1964 hasta mediados de los 80´ se da una migración marcada por el ingreso ilegal de mexicanos a EEUU y tiende a pasar de circular a tener un carácter más permanente. Es decir que los trabajadores ya no iban y volvían sino que se trasladaban con sus familias en forma permanente.
Finalizada la cumbre se firmaron ocho documentos y ninguno sobre esta propuesta, es muy probable que por tratarse de un asunto bilateral y que ya se encuentra en estudio desde marzo se resuelva próximamente.