La campaña lanzada por el Sindicato de Trabajadores de la Construcción (SUNCA) de Uruguay está a pocos días de cumplir dos años y el diario español El país se hizo eco del éxito alcanzado. Todo comenzó con la cobertura de una protesta del sector, durante la cobertura una de las periodistas sufrió todo tipo de comentarios de parte de los trabajadores.
A las horas esta periodista publicó en las redes sociales los padecimientos vividos y alcanzó una fuerte notoriedad y muestras de apoyo. En estas instancias el SUNCA publicó un pedido de disculpas y lanzó la campaña Uruguay sin acoso con las consignas “Mordete la lengua. El acoso es violencia” o “El trabajador digno no acosa”.
Laura Alberti, de 42 años es dirigente gremial y obrera del gremio de los ceramistas. “Nosotros tenemos una consigna clara: el acoso callejero es violencia. Entendemos que cuando uno increpa a una mujer se trata de acoso porque es una intromisión en su vida. Porque las mujeres no necesitan el piropo, no es algo que les aporte algo en su vida. Hay que hacerles entender que no me tienen que respetar porque podría ser una madre, una hermana o una tía, me tienen que respetar porque soy un ser de derechos”.
Alberti sigue de cerca la campaña llevando adelante charlas en las obras y cuenta que en los comienzos no fue fácil, “Nos costó mucho y tuvimos momentos de mucho rechazo. Los compañeros nos decían cosas como que la culpa la tiene ‘el inventor de la calza’ (o pantalón ajustado) o la culpa la tienen ustedes por vestirse así”, explica la responsable sindical.