En el marco de la emergencia sanitaria a nivel mundial la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre), que tiene como líder a Ramón Ayala, aseguró que el personal de la actividad está exceptuado del aislamiento social, preventivo y obligatorio. Pero que corre «un importante riesgo de contagio», por lo que propuso constatar «si cumple sus tareas en condiciones seguras y en consideración de los protocolos».
A través de un comunicado de prensa el dirigente sindical puntualizó que «ante las actuales difíciles circunstancias, lo principal es constatar si los rurales realizan sus tareas en condiciones seguras y en consideración absoluta de cada uno de los protocolos de las empresas y de las normas dictadas por las distintas jurisdicciones».
Las Aseguradoras de Riesgos del Trabajo (ART) deberán adoptar «los recaudos necesarios para que al recibir la denuncia y el diagnóstico respectivo los trabajadores damnificados reciban de manera inmediata las prestaciones previstas en la Ley 24.557», puntualizó Ayala.
Y sostuvo que para el caso de que algún trabajador rural contraiga la enfermedad deberá notificarse a las ART para que inmediatamente proporcionen las prestaciones médico-asistenciales que correspondan, indicó el documento.
«Esto es de suma importancia para la prestación sanitaria y las eventuales secuelas que permanezcan por la enfermedad (hasta incapacidad laboral por insuficiencia respiratoria), lo que también tendrán que contemplar las ART en el contexto de la Ley 24.557 y sus normas modificatorias y complementarias», concluyó Ayala en el documento firmado por el secretario de Actas, Prensa y Propaganda, Alberto Barra.