Reforma Laboral: «Lo primero que llega es la flexibilización de hecho»
Lo aseguró Juan Manuel Martínez Chas, abogado laboralista y asesor de organizaciones sindicales, al referirse al «cambio de paradigma» del derecho laboral en nuestro país.
El abogado laboralista y asesor de organizaciones sindicales, Juan Manuel Martínez Chas, analizó el impacto de las políticas neoliberales en la legislación laboral y aseguró que previo a la reforma en las condiciones de trabajo «lo primero que llega es la flexibilización de hecho».
En ese marco, señaló que el proceso de flexibilización comienza con «desregular los organismo de control y los organismos de tutela del trabajador. Fue muy notorio el cambio de política en el Ministerio de Trabajo».
«Lo primero que llega es la flexibilización de hecho antes de la flexibilización de derecho. Es decir, antes de la reforma, los grupos hegemónicos del modelo neoliberal comienzan a instalar una agenda donde la rigidez de los mercados laborales es prácticamente la causa de los males de la economía de los países«, analizó.
En diálogo con el programa Palabra Sindical de Radio Gráfica, Martínez Chas explicó que «tienen que ver con un clima de época y que viene articulado con una fuerte instalación cultural de esta cuestión, sin basamento científico, al contrario, y empieza con desregular los organismos de control y los organismos de tutela del trabajador».
El Máster en Empleo, Relaciones Laborales y Dialogo Social señaló el «cambio de política del ministerio de Trabajo» y sobre eso recordó que la cartera laboral fue creada a principios de siglo y «adoptó una tesitura diferente con la asunción del General Perón al cargo y que de alguna manera nació creado como organismo de tutela del trabajador a los fines de superar las asimetrías que existen en la realidad fáctica, que es la disparidad entre los dueños del capital y los dueños del trabajo».
Para el abogado, hoy la situación cambió. «Lo notamos en las negociaciones colectivas», aseguró, y agregó: «Existió un fuerte apriete por parte del ministerio de Trabajo a las partes negociadores para que las demandas salariales no cubrieran el componente del desfasaje inflacionario. Esto es perder poder adquisitivo. El pretexto era no homologar los convenios colectivos. Ese cerco fue rompiéndose a la medida que la realidad y la resistencia de los trabajadores y el movimiento obrero organizado fueron dando».
También resaltó una «inacción» y una «falta de una política activa» en materia de conflicto. «Nosotros tenemos una herramienta fundamental que es la ley de conciliación obligatoria que fue creada como una ley de enfriamiento, cuando se produce un conflicto colectivo lo que trata de es tender una mesa, establecer una situación de volver para atrás y ver de qué manera se puede desandar ese conflicto y salir para adelante», puntualizó.
En esa línea, el laboralista sostuvo que la conciliación se aplicaba en forma sistemática y en la actualidad se comenzó a aplicar para debilitar los reclamos de los trabajadores. «Cuando había una petición, una medida de acción directa inmediatamente a pedido de las empresas se daba curso al procedimiento de conciliación obligatoria como metodología de limitación del derecho de huelga pero cuando a la inversa sucedía que la que producía despidos, cesantías, incumplimientos, era la empresa, evidentemente el ministerio de Trabajo actuaba y no establecía esa tutela que debe establecer para proteger las fuentes de trabajo«, concluyó.