Reforma en Salud: los gremios no ven posible “una unificación” del sistema

El rebrote de los casos de Covid-19 parece haber demorado el debate por el “sistema integrado de salud” que planteó Cristina Kichner hace unas semanas y puso en alerta a más de un jefe sindical por una eventual delegación de las obras sociales a una autoridad federal. Con todo, en la CGT hay quienes piensan que una reforma al sistema es “necesaria” y que la idea de la vicepresidenta no necesariamente se vincula con la “unificación” de los distintos prestadores de salud.

La ex presidenta pateó el tablero en el acto del 18 de diciembre en el Estadio Único platense, no sólo por sus críticas a los funcionarios “que tiene miedo”, sino al plantear que se debía “integrar el sistema público y privado y el de obras sociales y prepagas” para hacerlo más eficiente frente a los desafíos planteados por la pandemia. Hace unos días repitió su consigna en un conversatorio del grupo de pensamiento del viceministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, al sostener que “en materia sanitaria debemos reconceptualizar el sistema. La pandemia mostró que algunos lugares tienen muchos recursos que a otros les faltan. Tenemos un modelo concéntrico que debe ser reformulado”.

Desde la cartera provincial conducida por Daniel Gollán, quien suena para dar el salto al ministerio nacional ante el desgaste de Ginés González García, explicaron que “es la idea general a la que estamos abocados, la pandemia permite realizar cambios, pero hay que trabajarlo en profundidad. Y ahora estamos corridos por la agenda: trabajando con vacunación y en medidas de contención de verano por el aumento de casos”.

En el ministerio nacional, en tanto respondieron de forma similar. Pero una fuente sindical consultada, con todo, esbozó con malicia “que la reforma son solo anuncios pero puede estar pensada sólo para ´secar´ de recursos a los hospitales porteños y traspasarlos a centros de salud del GBA” con vistas a la pelea electoral que se viene.

El ministro González García y el titular de la SSS Eugenio Zanarini

En su brindis de fin de año con el presidente Alberto Fernández celebrado en Olivos, la mesa chica de la CGT le reiteró los reclamos por el atraso en el pago de los fondos de las obras sociales que llevaron a La Fraternidad a realizar un paro de actividades, que sólo duro 12 horas por el dictado de una conciliación obligatoria que deberá refrendarse en algunos días. Y también, los jefes sindicales, comandados por el negociador José Luis Lingeri, le pidieron algunos retoques como “compartir” con Nación los gastos en discapacidad –en los rubros traslados y educación- y un aumento en las cuotas del monotributo para que los afiliados por esa vía puedan incorporar al grupo familiar.

Acerca de la reforma al sistema planteada por el oficialismo, un jefe sindical consultado por Mundo Gremial sostuvo que “estamos de acuerdo con lo que dijo Cristina en cuanto a replantear el sistema de salud. Las formas y el cómo, nada de eso se ha conversado. Pero tampoco dijo de juntar a todos los actores en una sola institución”. Asimismo, explicó que la coyuntura torna necesario “hacerlo más eficiente tanto en la atención del hospital público, siguiendo con el planteo de las obras sociales, algunas de las cuales son inviables. Y también por el lado de las prepagas con diferencias que harían necesario un replanteo”.

En las últimas semanas Lingeri ha tenido contacto con el titular de la Superintendencia de Servicios Salud, Eugenio Zanarini, en buscan de subsanar los distintos reclamos. Pero la mayor parte del paquete de deuda persiste. “Estamos esperando que Trabajo nos convoque por el tema de la conciliación. Y desde entonces la Superintendencia pagó sólo un pequeño porcentaje de la deuda de casi $160 millones que tiene con la obra social ferroviaria”, dijeron cerca de Omar Maturano, titular de los maquinistas.