Los 200 informáticos despedidos por IBM Argentina S.R.L. en la última semana causaron revuelo en todo el mundo. Pero esto ha sido sólo la punta del iceberg, ya que la reducción de la nómina de IBMers comenzó hace más de dos años. Y bien se sabe que IBM Argentina es el reflejo por excelencia de la realidad informática argentina.
Entre despidos y renuncias inducidas por el congelamiento de salarios, el número de empleados se redujo de casi de 10000 en Mayo de 2010, a menos de 7000 en la actualidad. Y la cifra continúa cayendo. La tendencia se repite en las distintas empresas informáticas en la Argentina tales como Hewlett-Packard, PSA, Symantec y la lista sigue.
¿Qué pasa con el sector informático en la Argentina? ¿Cuál es la política del gobierno para detener la sangría del sector IT argentino, piedra angular del crecimiento y posicionamiento de nuestro país.
Renuncias nada voluntarias
Además de realizar despidos de formas más o menos discretas, que fueron denunciados repetidamente por la Unión Informática, IBM Argentina forzó la renuncia de miles de empleados. Para ocultar congelamiento de los salarios, se implementó un plan de magros “aumentos”HYPERLINK «http://unioninformatica.com.ar/aumentos-en-ibm/» selectivos y arbitrarios. Esto fue posible gracias a las conocidas “evaluaciones de desempeño”, que fomentan la competitividad y la desigualdad entre los informáticos. Estos pequeños incrementos, muy inferiores a la inflación (incluso la del INDEC) y a las paritarias de otros gremios, fueron acompañados con detalladas instrucciones para que los gerentes los comuniquen a los empleados.
También se conocieron casos de acoso laboral y cambios arbitrarios en las condiciones de trabajo, categorización inadecuada para mantener los salarios bajos, y fraude laboral por tercerización. La Unión Informática llevó adelante acciones legales para corregir tales irregularidades a quienes se acercaron para asesorarse, logrando grandes resultados especialmente en la tercerización a través de consultoras. Sin embargo, muchos empleados optaron por renunciar, acorde a los planes de la empresa.
El problema en números
A pesar de que IBM continúa refiriéndose al total de empleados como los 10.000 que alguna vez fueron, la realidad se aleja cada vez más de ello.
• En Mayo del 2010, la nómina de personal en la empresa era de casi 10.000 empleados
• A la fecha, la nómina de empleados no llega a los 7000.
• Esto implica una reducción de más del 30% del personal en dos años.
Muchas promesas, un solo plan: la reducción de personal
La Unión Informática denunció desde el principio el accionar de la multinacional, que desde mediados de 2010 comenzó a expulsar a numerosos informáticos. La situación fue presentada ante el Ministerio de Trabajo de la Nación, que el 19 de mayo de 2011 convocó a una reunión a IBM Argentina y la Unión Informática. En dicha ocasión, IBM no desmintió los despidos, pero negó que los empleados estuvieran disconformes con las políticas salariales. Pocos días más tarde, sin embargo, el gerente general de IBM, Jorge HYPERLINK «http://www.youtube.com/watch?v=Gvtb1hdOmkk&feature=context-cha»GoulúHYPERLINK «http://www.youtube.com/watch?v=Gvtb1hdOmkk&feature=context-cha» anunció “un plan salarial” a implementarse en las siguientes semanas, cosa que jamás ocurrió. Un mes más adelante, Jorge HYPERLINK «http://unioninformatica.com.ar/ibm-reconoce-que-existe-un-retraso-en-el-salario-de-sus-trabajadores/»GouHYPERLINK «http://unioninformatica.com.ar/ibm-reconoce-que-existe-un-retraso-en-el-salario-de-sus-trabajadores/»lHYPERLINK «http://unioninformatica.com.ar/ibm-reconoce-que-existe-un-retraso-en-el-salario-de-sus-trabajadores/»úHYPERLINK «http://unioninformatica.com.ar/ibm-reconoce-que-existe-un-retraso-en-el-salario-de-sus-trabajadores/», admitió en un video institucional un “problema salarial” junto con su “compromiso para resolverlo”, según sus propias palabras.
Ante la ausencia de una acción real por parte de IBM, el 28 de julio de 2011 tuvo lugar la primera huelga de informáticos en la historia de IBM Argentina. Los empleados sufrieron amenazas desde la gerencia antes y después de la huelga, y no se modificaron las políticas salariales de la empresa, aunque se regularizaron algunas situaciones como el fraude laboral por tercerización. Ante la falta de respuestas, la Unión Informática convocó a una nueva huelga el 28 de septiembre de 2011. Tampoco en esta ocasión hubo una apertura al diálogo o una mejora sustancial en las políticas por parte de la empresa. El éxodo de empleados siguió su curso. IBM no reemplazó a quienes se fueron, y la población de informáticos en la empresa continuó decreciendo.
En febrero de 2012, tuvieron lugar en IBM las llamadas “Town HYPERLINK «http://unioninformatica.com.ar/town-meetings-y-la-preocupacion-de-ibm-argentina/»MeetingsHYPERLINK «http://unioninformatica.com.ar/town-meetings-y-la-preocupacion-de-ibm-argentina/»”, reuniones para empleados en las que los gerentes repasan los objetivos de la compañía y su desempeño. En ellas, Jorge Goulú anunció las ganancias millonarias de IBM Argentina y destacó que el problema salarial era su mayor preocupación. Al contrario de lo que afirmó un año antes, cuando reconoció que era un asunto corporativo, en su nueva presentación culpó a la inflación por los bajos salarios.
“Acá no pasa nada”
Los despidos masivos iniciados por IBM Argentina tuvieron una trascendencia mundial gracias a la denuncia de la Unión Informática, llegando a publicarse incluso en la bolsa de comercio de Nueva York (Nasdaq). Cuando los medios de comunicación indagaron a IBM acerca del asunto, la respuesta fue que no pueden confirmar ni desmentir las versiones por “política de la empresa”, una excusa a la que los empleados de IBM ya se encuentran habituados.
