ANÁLISIS Y OPINIÓN
Nuevos aires para los sindicatos chilenos
El 11 de marzo se efectúa en Chile el traspaso del mando Presidencial y la cartera laboral está en plena transición. Por @FernBernardino

El paso viernes se desarrolló el primero de tres encuentros en que el actual Ministro de Trabajo, Juan Carlos Jobet, y su futura sucesora, Javiera Blanco llevan adelante la transición dentro del organismo. Participaron a su vez los respectivos subsecretarios de entrantes y salientes. En este marco prevén dotar de armonía a un proceso que auspicia cambios significativos.
En la plataforma de gobierno Michell Bachelet incluyó una batería de medidas que sedujo a las capas medias y bajas de la sociedad. Entre ellas se destaca una reforma tributaria que genere más ingresos a las arcas públicas de sectores que no contribuían y por otra parte una distribución más equitativa de los ingresos.
Desde la nueva gestión del Ministerio de Trabajo se apunta a la capacitación de 450 mil mujeres y jóvenes. Elaborar un proyecto de ley para enviar al congreso para luchar contra el multirut (Maniobra empresarial que abusa de múltiples razones sociales para limitar la responsabilidad y dilatar los procesos judiciales).
Una ambiciosa reforma previsional crearía una “Administración Estatal de Fondos para Pensión” de corte solidario que competiría con la actual sistema de capitalización creado durante el gobierno de Pinochet.
En materia de participación sindical la plataforma electoral expresó claramente «es necesario fortalecer el sindicato como sujeto de la negociación colectiva. Vamos a impulsar una negociación colectiva con titularidad sindical. Adicionalmente, se extenderán los beneficios, de manera automática, al trabajador que se afilie al sindicato que negoció el contrato colectivo».
Ya durante la campaña la presidente electa se había pronunciado sobre la violación a la libertad sindical: «Se nos ha notificado desde la OIT y ONU de incumplimiento del convenio 87 sobre libertad sindical. Es tiempo de avanzar en este sentido para cumplir nuestros compromisos internacionales y con nuestros trabajadores».
Por último cabe destacar que esta dirección pretende empoderar a las Asociaciones Sindicales para atemperar la difícil situación de los trabajadores chilenos. Existe como consecuencia de la subcontratación, multirut y las altas tasas de movilidad en el empleo, conviviendo con una casi nula tutela del derecho laboral. Esta tendencia llevó a nuevas formas de lucha por parte de sectores jóvenes que como en el sector portuario, operan fuera de la legalidad en los conflicto y han logrado negociaciones más beneficiosas con el empresariado.
En la actualidad los sindicatos que cuentan con mayor cantidad de afiliados y mejor representatividad son los relacionados con el sector público. Es quizás este nuevo rumbo la válvula que regule los conflictos sociales que pudieran tener lugar en un futuro cercano.
Por @FernBernardino
