Morales y Choferes se reúnen en Palacio, el paro es incierto

Morales programó ese encuentro de madrugada en su agenda oficial difundida la noche de este viernes por Palacio de Gobierno que anuncia una reunión de una hora, tras la misma ofrecerá una conferencia de prensa, donde informarán el resultado de este encuentro decisivo.

Hasta la tarde de este viernes, era improbable un encuentro entre el gobierno y choferes, debido a que estos últimos habían puesto como condición insalvable la derogatoria del decreto 890 del Ministro Walter Delgadillo que obliga a los choferes a renovar el parque automotor con 12 años de antigüedad a partir del año 2018.

En fuentes sindicales de los transportistas se recibió con absoluto hermetismo sobre las condiciones del diálogo, empero ratificaron su exigencia de derogar el decreto y anular toda intencionalidad de renovación obligatoria que el MAS prevé aprobar en la Ley General del Transporte.

La Asociación de Transporte Libre, a través de su presidente Freddy Paucara, aseguró que desde el lunes no habría servicio en las áreas interdepartamentales, interprovinciales del área urbana, así como radiotaxis

El Secretario ejecutivo de la Federación de Transportistas de La Paz, René Vargas, dijo que el paro está confirmado porque el decreto 890 que obliga a renovar el parque automotor, es una masiva relocalización (despidos) de sus afiliados, así como se votaron a 35 mil mineros en 1985 y advirtió que «la situación es de vida o de muerte».

La Cámara Boliviana de Transportes Nacional e Internacional arribó a un acuerdo con el Ministerio de Hacienda, por lo que dieron por suspendida su amenaza de bloquear fronteras para entablar diálogo sobre la nacionalización de las chatas, remolques y semirremolques que, por mandato de la ley de regularización de autos indocumentados, debe pagar como si estuvieran siendo nacionalizados.

El Ministro Delgadillo defendió hasta el último su decreto porque «se trata de la vida y defensa de la gente y esa no es una cuestión negociable. «Cuando más discutiremos la formas, pero la vida de la gente, su salud y medio ambiente para por la modernización del sistema automotriz, es una cuestión de principio».

Adicionalmente sostuvo que hará todo lo posible para evitar la medida de presión, a la que consideró «lapidaria, dura y agresiva hacia la ciudadanía».