Malestar en la UTEP por el virtual congelamiento de su ingreso a la CGT

Entre los dirigentes sociales hoy se percibe malestar en algunos, cierta expectativa en unos pocos, por el virtual congelamiento del ingreso de la UTEP (Unión de Trabajadores de la Economía Popular) a la CGT.

Vencido el plazo del 11 de noviembre, cuando la central sindical renovó su conducción y se prometía un cambio en los estatutos, se esperaba una aceleración en las negociaciones pero no hubo novedades ni contactos entre los dirigentes. Una primera versión daba cuenta de la creación de un “observatorio o instituto” que funcionaría por debajo de la secretaría de Políticas Económicas y Sociales de CGT, a cargo de Omar Plaini (Canillitas). Pero nada se concretó.

“Los dejaron afuera. Hay molestia porque varios secretarios generales habían dicho que sí. Pero tampoco tenemos ninguna movida en común en el corto plazo», explicó una fuente consultada aún afectada porque no se hizo un «nosotros más amplio», una frase del “Gringo” Castro, de UTEP, que tiene un origen en las jornadas que el Papa Francisco llevó a cabo hace meses por los migrantes del mundo.

Para Juan Carlos Alderete, diputado y titular de la Corriente, Clasista y Combativa (CCC), que funciona bajo el paraguas de la UTEP, “sería un paso importante a nivel político pero hay cuestiones de organicidad que deberían modificarse porque la economía informal se encuentra en una situación de contradicción sino se modifican los estatutos de la propia CGT».

Para algunos dirigentes, en la resistencia de los jefes sindicales a aceptar a la economía popular dentro de la institución de calle Azopardo se mezclan prejuicios y cierto temor por la gran cantidad de militantes que desembarcarían en la institución desde una sola agrupación. Ante la previsión de un año difícil, con alta inflación e incertidumbre por las negociaciones con el FMI, es claro el desafío que tiene el movimiento obrero organizado respecto a incorporar a la economía social y popular (cooperativistas e independientes)

Sí sucede en algunas regionales cegetistas, como es el caso de la de Entre Ríos y Córdoba, donde sí están incluidos los movimientos sociales en aquellas estructuras.

En las organizaciones habían tomado de buen modo la asunción del nuevo triunvirato: con Pablo Moyano habían tenido nexos de coordinación a través del Fresimona y con Héctor Daer, Esteban “Gringo” Castro ha coincidido en varias presentaciones públicas. La última se realizó el 4 de diciembre último en ocasión de las jornadas de la Pastoral Social de la ciudad de Buenos Aires.