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Ladrillera Loimar volvería a producir y aún se negocian reincorporaciones
La fábrica tandilense cesó su actividad en octubre pasado desvinculando a una decena de operarios y suspendiendo a más de treinta.
La empresa tandilense Loimar que ya lleva más de tres meses de inactividad volvería a producir en los próximos días, pero aún se sigue negociando si los diez trabajadores despedidos serán reincorporados. La Federación Obrera Ceramista de la República Argentina junto a la patronal mantendrán una segunda reunión la semana próxima en pos de destrabar el conflicto.
En febrero pasado representantes de Loimar decidieron echar a diez empleados y suspender a más de treinta, justificando la decisión en la caída de ventas y fuertes incrementos tarifarios.
Por su parte, el delegado de los trabajadores, Alberto Algañaraz, afirmó que “hay cosas que tenemos que acomodar dentro de nuestras posibilidades pero lo bueno que rescatamos es que nos pudimos sentar a dialogar con el empresario para ver de qué manera quiere comenzar a trabajar y conocer su situación después de estos meses que han pasado”.
Loimar desarrolla su actividad en el mercado nacional desde 1980, siendo uno de los principales productores de cerámica roja, tejas y ladrillos y posee una planta industrial de alta tecnología en la ciudad bonaerense.
Luego de la primera reunión llevada a cabo entre las partes, después de tantos días de incertidumbre, aún resta resolver cuál será el futuro que le depara a los diez obreros despedidos. El resto de los operarios, en tanto, se mantienen firmes para que no quede ningún empleado afuera, mientras que desde la empresa reafirmaron su voluntad de sostener los despidos realizados.
El pasado viernes se había fijado una audiencia en la Cartera de Trabajo nacional, aunque finalmente las partes se reunieron de manera independiente en CABA. Del encuentro participaron el titular de la firma, Juan Loitegui, el secretario general del sindicato, Domingo Moreira; el secretario adjunto, Hugo César De Franchi; y los delegados tandilenses Sebastián Gere, José Goñi y Alberto Algañaraz.
“No estamos de acuerdo con los despidos arbitrarios y defendemos a nuestros compañeros que tienen un legajo impecable. La reapertura de la planta no sirve de nada si quedan excluidos algunos trabajadores, es con todos adentro o se hablará de alguna otra forma”, remarcó Algañaraz.
La semana entrante, entonces, continuará la negociación entre los trabajadores y la patronal donde se buscará terminar de resolver el conflicto para volver a poner en marcha la fábrica.