La Unión Industrial Argentina (UIA) y la Confederación de Gremios Industriales coincidieron en la necesidad de «profundizar el diálogo» de cara a las próximas paritarias, preservando prioritariamente «los puestos de trabajo y el poder adquisitivo de los trabajadores».
El encuentro, que se llevó a cabo en la sede de la UIA, donde acordaron volver a reunirse antes del 15 de marzo, con el objetivo de trabajar «conjuntamente» para defender el modelo industrial con inclusión social.
Las cámaras metalúrgicas que participan de la negociación salarial con el gremio de la UOM, que lidera el jefe de la CGT oficial, Antonio Caló, acordaron aceptar la solicitud del gremio de otorgar el pago de una suma fija mensual de $ 700 para febrero y marzo a cuenta de la paritaria de la actividad.
Por parte de la UIA, además de Méndez, participaron José Ignacio de Mendiguren, Juan Carlos Sacco, Daniel Funes de Rioja, Cristiano Rattazzi, Guillermo Moretti, Guillermo Padilla, Adrián Kaufmann Brea, Juan Carlos Lascurain y Martín Etchegoyen, entre otros.
En representación de la Confederación de Gremios Industriales asistieron, además de Caló, Oscar Romero (SMATA), Manuel Pardo (SMATA), Alberto Murúa (Plásticos), Alvaro Rodríguez (Plásticos), Roque Garzón (Farmacia), Romildo Ranú (Textil) y Jorge Lobais (Textil).
El dirigente gremial, Antonio Caló, evitó una vez más manifestarse sobre un eventual porcentaje de aumento salarial en el marco de las paritarias y sugirió esperar los tiempos de negociación, sin abrir falsas expectativas.
«Yo no le pongo ni piso ni techo salarial a nadie, como tampoco me gusta que lo hagan en mi sector, sería un irresponsable y estaría dando lugar para que los formadores de precios aprovechen esa situación y salgan a remarcar los productos», aseguró Caló.
En sus cálculos, la suma extraordinaria de $ 700 representa una mejora del 15% sobre los básicos de convenio de la UOM, y descuentan que el gremio presionará por un aumento porcentual adicional de manera de asegurarse un nivel de recomposición por encima del 25% que el Gobierno aspira a imponer como referencia para las paritarias.-
