La unidad no es el camino, es nuestro destino

La Confederación General del Trabajo (CGT) se fundó el 27 de septiembre de 1930. Fue integrada en sus inicios por sindicatos de diversos sectores, anarquistas, socialistas, comunistas. Han pasado 90 años de aquel momento histórico que fue el puntapié inicial de las conquistas y derechos que el movimiento organizado supo conseguir.

El quiebre en la vida histórica de nuestra central llegaría años después, en los años 40, con la figura del hombre que fortaleció al sindicalismo argentino: Juan Domingo Perón. Desde entonces la CGT se convirtió en columna vertebral del proyecto justicialista y fue Perón quien acompañó e instó la unidad de los trabajadores.

De ahí en adelante la fortaleza del movimiento obrero organizado, embanderado en nuestra central única, y el modelo sindical peronista se volvió ejemplo en todo el mundo hasta la actualidad.

Hoy los nuevos tiempos, este momento histórico para la humanidad nos demostró la importancia de las organizaciones sindicales, su poder de organización, la salud solidaria que brindamos con el esfuerzo de todos los trabajadores.

Tenemos que recuperar el empleo y pensar la nueva Argentina, pero tenemos el desafío del futuro del trabajo, la necesidad de capacitar a nuestros trabajadores y a las nuevas generaciones. El movimiento obrero tiene la red de formación profesional más grande de este país.

Por eso nuestra unidad tiene que ser inteligente, porque como dice Scalabrini Ortiz, si no pensamos la Argentina desde adentro, la piensan otros desde afuera, y nuestra CGT fue y será un actor central de los destinos de esta bendita Nación.

¡Viva Perón, Viva la CGT!

* Secretario general de la Federación Argentina Sindical de Petróleo, Gas y Biocombustibles – FASiPeGyBio