La CGT se prepara para recibir a Alberto Fernández en Azopardo

La Confederación General del Trabajo (CGT) formalizará esta semana su primer paso para una nueva reunificación en la central obrera.

Será el próximo viernes cuando se realice un plenario de secretarios generales en su sede de la calle Azopardo.

El objetivo será comenzar a evaluar el clima interno para ir hacia una unidad total de la central de cara al inicio de la gestión de Alberto Fernández.

El presidente electo confirmó su participación en la reunión gremial, que contará con varias facciones de la CGT ya que la mayoría de ellas se pronunció a favor de la candidatura de Fernández durante la campaña, con mayor o menor énfasis.

Con el triunfo de Alberto, el reacomodamiento interno ya empezó a dar las primeras señales, y lo que parecía imposible años atrás, hoy es una posibilidad latente.

Así, para este viernes 8 se espera la presencia de los actuales dirigentes de Consejo Directivo y aquellos que se apartaron de la conducción por diferencias con el fallido triunvirato.

Dirán presente en el plenario Héctor Daer, Armando Cavalieri, Rodolfo Daer (gordos); Andrés Rodríguez, Gerardo Martínez y José Luis Lingeri (independientes) y Omar Maturano y Roberto Fernández (Transporte-CATT).

También asistirían dirigentes que no estaban actualmente dentro de la conducción cegetista y que ahora estarían dispuestos a regresar, como los representantes del MASA, Omar Viviani (Taxis) y Sergio Sasia (Unión Ferroviaria); el jefe de la UOM, Antonio Caló; el de Peones Rurales de la UATRE, Ramón Ayala; y el de Dragado y Balizamiento, Juan Carlos Schmid, entre otros.

En la CGT ya preparan un escenario de fuerte apoyo a Alberto Fernández, quien durante la campaña les pidió la «unidad» del fragmentado sindicalismo para poder llevar adelante el «pacto social» que espera poner en marcha con ese sector y los empresarios al inicio de su gestión.

Resta saber cuál será el protagonismo de Hugo Moyano en la nueva CGT, tras la ausencia del camionero en los últimos tres actos peronistas.

Lo concreto es que no se permitirá ceder espacio en los lugares de decisión, por lo que es fija que un alfil de su entorno esté presente en la reunión y en las próximas conversaciones de unidad.