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La CGT evocó a Saúl Ubaldini en el aniversario de la primera movilización contra la dictadura

La central sindical resaltó la figura del sindicalista, al cumplirse 43 años de la primera marcha de protesta impulsada por la CGT Brasil contra la dictadura cívico – militar.

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La Confederación General del Trabajo (CGT) realzó este jueves la figura del histórico sindicalista Saúl Ubaldini, al cumplirse un nuevo aniversario de la primera movilización popular contra la dictadura cívico – militar en 1981.

Se trató de la primera acción de protesta contra la dictadura militar tras el Golpe de Estado del 24 de marzo de 1976. La movilización se llevó adelante bajo la consigna «Paz, Pan y Trabajo» y fue convocada por al CGT Brasil que conducía Ubaldini.

La actual conducción de la CGT resaltó el valor de Ubaldini para enfrentar al gobierno de facto y destacaron que en la jornada del 7 de noviembre de 1981 «miles de trabajadoras y trabajadores hicieron escuchar su reclamo por los derechos laborales y económicos destruidos por la dictadura».

Además, subrayaron una de las frases célebres del histórico sindicalista: «Cuando se quiere luchar, siempre hay alternativa».

Paz, Pan y Trabajo

La CGT Brasil, encabezada por Saúl Ubaldini, junto a otras vertientes del sindicalismo llevó adelante la primera movilización popular o “Marcha de Protesta” en contra de la dictadura.

La protesta se realizó bajo el lema Paz, Pan y Trabajo. Los organizadores llamaron a marchar desde el estadio de Vélez Sársfield hasta la iglesia de San Cayetano, donde se habían juntado unas diez mil personas. Los nuevos líderes sindicales, de organizaciones pequeñas, trataban de coincidir con los grupos de base de la Iglesia.

La numerosa marcha desafió –a pesar de la intimidación de los medios de comunicación- el despliegue de un inmenso operativo de seguridad y asistieron a una misa oficiada al aire libre.

Por primera vez se coreó masivamente una consigna que luego ganaría la calle: “Se va a acabar, la dictadura militar”. La represión no se hizo esperar. Pero se demostró que la central obrera se había convertido en el eje de la protesta nacional.

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