La CGT apuntó contra los empresarios y le pidió al gobierno la vuelta del ATP

La disputa por precios y salarios fue una constante en primer tramo del año y promete tener continuidad en los próximos meses, en medio de la segunda ola de coronarivus. Es que los gremios aseguran una falta de compromiso por parte de los empresarios en el acuerdo celebrado ante el gobierno nacional.

Para Carlos Acuña, cotitular de la CGT, señaló que los trabajadores «tenemos buena voluntad, pero no hay del otro lado la voluntad que debería«. Se refiere al sector empresario que, según el dirigente, «no quieren poner ningún sacrificio de nada».

El sindicalista apuntó a los «sectores poderosos» por los aumentos de precios. «Hay cuatro vivos que se llevan toda la ganancia» cuando «tenemos que colaborar todos», apuntó.

En diálogo con Radio 10, Acuña transmitió la preocupación de la CGT en relación a los índices actuales de inflación y, con la certeza que la meta del 29% no se cumplirá, anticipó que continuarán las revisiones salariales en paritarias.

«A nadie le alcanza (el dinero) y no hay aumento que sirva en esta inflación», reflexionó Acuña, e insistió con la falta de compromiso de los empresarios: «Tienen que poner la voluntad de sacar el país adelante».

Al referirse a las negociaciones salariales, señaló que los trabajadores «con ese 6 ó 7 por ciento» que pueden ganar por encima de la inflación no llevarán el dinero «a las Islas Canarias, sino que es para los gastos cotidianos».

E insistió en que si las paritarias le ganan al Índice de Precios al Consumidor, «circula la plata y, al haber consumo, es necesaria la producción y si la producción funciona es porque hay consumo y genera trabajo».

Acuña resaltó que los sindicatos «habían arreglado por encima de lo que debería ser la inflación con la posibilidad de una revisión para recomponer lo que va a faltar», pero «al paso que vamos, va a faltar», estimó.

El dirigente también habló sobre el resguardo del empleo y reclamó el retorno del Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP), por el cual el Estado se hizo cargo del 50% de los salarios de los sectores en crisis por la pandemia.