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Instituto Malbrán rechaza precariedad laboral

Los trabajadores del Instituto Malbrán paralizaron otra vez las tareas en rechazo de «la precariedad laboral, los bajos salarios y la ausencia de concursos» y en reclamo del «cese de la intervención».

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La protesta se realizó durante toda la jornada, con la adhesión de los empleados de los Institutos y hospitales nacionales, como el CENARESO, de Alimentos y Medicamentos (ANMAT), INAREPS, Posadas, Sommer y la Colonia Montes de Oca, entre otros centros.

«Continúan arriesgándose las funciones esenciales que cumple el Malbrán (control de las principales enfermedades infectocontagiosas como el chagas, tuberculosis, dengue, síndrome urémico y gripe); la producción y control de vacunas y reactivos de diagnóstico y la vigilancia de resistencia a antibióticos por el incumplimiento de los acuerdos de 2008», aseguró el personal.

Los trabajadores reclaman «el pase de los más de 500 contratados precarizados a planta, haberes acordes a la importancia de las tareas científico-sanitarias realizadas, el reconocimiento de las funciones, el cese del desmantelamiento de los centros sanitarios y la incorporación de personal especializado en áreas críticas».

Los representantes de los trabajadores ofrecieron una conferencia de prensa para explicar los motivos del extenso conflicto frente al Malbrán, en Vélez Sársfield 563 y, desde el mediodía, deliberaron en asamblea y cortaron la avenida.

El comunicado de prensa fue firmado por María Freire y Flavio Vergara, dirigentes de las Asociaciones de Profesionales del Malbrán y de Trabajadores del Estado (ATE), respectivamente.

Los representantes de los trabajadores explicaron que el personal del Malbrán, entre otras tareas, produce y controla vacunas, sueros antiofídicos y reactivos de diagnóstico; conduce la red de vigilancia de resistencia de antibióticos; controla el síndrome urémico hemolítico en hamburguesas y está al frente del control de la gripe y otros virus respiratorios.

«También actúa ante la aparición de brotes de hantavirus, hepatitis y meningitis, entre otras patologías, y es referente nacional del Chagas, aunque un técnico especializado y con cinco años de antigüedad percibe con el último aumento 2.950 pesos», aseguraron los sindicalistas, para agregar que la mitad de los empleados tiene «contratos precarizados o tercerizados».

Los dirigentes concluyeron subrayando que el Malbrán «está intervenido desde 2002» y se pronunciaron por «la defensa del Instituto y de la salud pública».

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