INFORMACIÓN GENERAL
Gremios del sector aeronáutico piden un aumento del 40%
Los sindicatos más influyentes que vienen reclamando la suba, y que amenazan con medidas de fuerza en caso de no llegar a un acuerdo, son el de los técnicos (APTA), a cargo de Ricardo Cirielli; el de los pilotos internacionales (APLA, en manos de Jorge Pérez Tamayo) y el de los de cabotaje (UALA), a cargo de Claudio Somoza). Completan la lista la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (UPSA) y la Asociación del Personal Aeronáutico (APA).
La semana pasada hubo reuniones en el Ministerio de Economía para avanzar con los gremios. Por el lado oficial los negociadores fueron la viceministra de Trabajo, Noemí Ríal; el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi; el secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa y el presidente de Aerolíneas, Mariano Recalde. Ofrecieron una mejora de un 24 por ciento a pagar en res tramos.
Sin embargo, esa propuesta fue rechazada de plano por los representantes gremiales, quienes sostienen que la brecha entre la oferta y lo que ellos reclaman es demasiado amplia.
Por eso, las negociaciones continuarán en los próximos días, ya que desde el Gobierno quieren evitar la imagen de pasajeros varados en las distintas terminales aéreas del país, en un año que ha sido complicado producto de la erupción del volcán Puyehue en Chile, que obligó a suspender y cancelar vuelos durante varios días en las últimas semanas.
Fuentes gremiales señalaron que «no llegamos a ningún acuerdo; es imposible aceptar esa propuesta. Estamos muy lejos y la situación efectivamente está cerca de derivar en un conflicto».
Desde el lado oficial, en tanto, reconocieron que la negociación está «difícil», pero remarcaron que la línea aérea de bandera no está en condiciones de acceder a los pedidos gremiales ya que la cancelación de vuelos que provocó la ceniza del volcán Puyehue le hizo dejar de vender pasajes por u$s45 millones entre junio y julio y complicaron aún más a unos estados contables que ya están sofocados.