En los últimos días se confirmó el despido por parte de la multinacional frutícola multimillonaria de propiedad japonesa Fyffes, del personal afiliado permanente del sindicato independiente de trabajadoras/es agrícolas y afiliado a la UITA, el Sindicato de Trabajadores de la Agroindustria y Similares (STAS).
Frente a este escenario, y según la interpretación de organizaciones internacionales de derechos humanos y la propia Regional, este accionar deja en evidencia que se está haciendo caso omiso de las leyes nacionales y las normas laborales internacionales que salvaguardan el derecho de trabajadores y trabajadoras a organizarse.
Según el documento del Foro Internacional de Derechos Laborales, con la sumatoria de casos de represión sindical y violaciones de las normas internacionales del trabajo que hicieron, Fyffes se convierte en un caso emblemático en una denuncia presentada por los sindicatos hondureños y la AFL-CIO a través del capítulo laboral del Tratado de Libre Comercio República Dominicana-Centroamérica (CAFTA-DR).
Entre las 14 personas despedidas se encuentran el Secretario General de la sección local del STAS, tres dirigentes sindicales y una persona trabajadora de laboratorio que denunció a principios de año que el suministro de agua de las trabajadoras y trabajadores del melón estaba contaminado.
El sindicato junto a sus aliados globales presentaron una lista de pedidos a la empresa, sumado a las demandas en contra de Fyffes que fueron enviadas al Ministerio de Trabajo de Honduras:
- Fyffes debe readmitir inmediatamente a las 14 personas trabajadoras fijas despedidas improcedentemente
- Fyffes debe cesar inmediatamente toda forma de represalia antisindical contra las personas trabajadoras que ejercen sus derechos laborales fundamentales
- Fyffes debe reanudar las negociaciones y firmar el acuerdo vinculante para proteger los derechos laborales de trabajadores y trabajadoras.
Fuente: LatamGremial