Estatales de ATE ratificaron el paro nacional por un «bono de emergencia» y «un freno al FMI»

La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) ratificó la convocatoria a un paro nacional de estatales en rechazo al aumento salarial «insuficiente» otorgado por el gobierno a los empleados de la administración pública y para exigir el pago de un «bono de emergencia» y «un freno al FMI».

La medida será el próximo viernes 16 de junio, días antes de la convocatoria al Consejo del Salario. Pararán los estatales nacionales y de las provincias y municipios donde la conducción de ATE tiene representación.

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“Estamos ante una gravísima transferencia de fondos desde el bolsillo de la clase trabajadora hacia los sectores más concentrados de la economía mediante un mecanismo perverso que es el inflación”, advirtió Hug «Cachorro» Godoy, titular de ATE.

Godoy ofreció una conferencia de prensa junto a dirigentes de ATE y miembros de organizaciones sindicales y sociales que se sumarán a la jornada de protesta.

El secretario general de ATE señaló la necesidad de «un aumento de emergencia, y el freno al FMI, que es el principal impulsor de esa transferencia de la que hablamos”.

El dirigente estatal consideró que “en la Argentina no faltan recursos sino que existe una inequidad distributiva», y concluyó: “Este Paro Nacional busca las respuestas que hasta ahora no hemos obtenido, pero debemos advertir que profundizaremos las medidas en caso de que tampoco tengamos respuestas en esta oportunidad”.

Rodolfo Aguiar, Secretario General Adjunto de ATE, confirmó la adhesión de los estatales a la medida: “No podemos seguir permitiendo que los dueños del dinero en la Argentina sigan haciendo lo que quieren y nadie les ponga un freno”.

“Necesitamos desmitificar que los aumentos a los trabajadores son los que generan inflación, porque la plata en el bolsillo de los trabajadores no la genera, pero sí lo hace cuando está en los bolsillos de los sectores concentrados”, exclamó Aguiar.

El paro de ATE confirma el quiebre en la relación entre el sindicato y el gobierno de Alberto Fernández, con quien en los tres primeros años de gobierno mantuvieron un diálogo cercano con firmas de paritarias y sin conflictividad.