El Gobierno desreguló el transporte de cargas: «una fiesta para el ‘trucho'», aseguran los empresarios

El gobierno nacional eliminó este lunes la obligatoriedad de la Licencia Nacional de Transporte Interjurisdiccional (LINTI), para camiones de carga. La baja del requisito para ejercer la actividad fue realizada de manera conjunta entre el Ministerio de Desregulación, que conduce Federico Sturzenegger y la secretaria de Transporte a cargo de Franco Mogetta.

La iniciativa fue presentada como una medida en línea con el proposito del Ejecutivo de reducir la carga burocrática y los costos para las empresas de camiones, y desde el gobierno celebraron que la resolución significa un golpe al líder camionero, Hugo Moyano, puesto que los controles se realizaban en centros de salud asociadas a la obra social del gremio, SICHOCA.

En el gobierno remarcan que el “registro Moyano” significaba una traba burocrática con un requisito que ya existe en el sector a través de la certificación de la licencia de conducir. A partir de hoy, la cantidad de documentación que deben llevar los choferes queda reducida sólo a la licencia. La nueva norma comenzará a ser plenamente efectiva dentro de los próximos 60 días, según indica la resolución del gobierno.

Si bien la medida fue bien recibida en algunos sectores patronales, algunas cámaras advirtieron que la quita del LINTI no solo no afecta al costo del empleador, sino que abre la puerta para el transporte de carga ilegal en el sector.

En esa línea, el Director Ejecutivo de la FADEEAC, Roberto Rivero, aseguró que el decreto, “no deroga la licencia interjurisdiccional, sino que cuando refiere a los controles en las rutas nacionales y provinciales que las autoridades hacen, no hacen exigible esta licencia“ y se quejó de que el decreto esta escrito con “una técnica legislativa bastante extraña”, indicó.

Rivero explicó que, a partir de la entrada en vigencia del decreto, “con el registro que te da el municipio donde vivas, sea particular o camión es suficiente para hacer un transporte de carga interjurisdiccional”, subrayó.

Además, advirtió que si bien fue presentado como un ahorro de costos para el transporte, “nosotros pensamos que es una irresponsabilidad manifiesta, una vendida de humo tremenda, no le cambia nada al empresario del transporte” y explicó que el examen de capacitación solo significa un 0,93% del costo laboral para las empresas, “es absurdo pensar que los empresarios del transporte van a bajar la tarifa porque les bajaron esto”, señaló.

El dirigente empresario insistió en que para la entidad, “esto es una fiesta para el truchaje del transporte, que nunca cumplen nada y andan por la ruta con choferes que no son controlados” y criticó que, “el único que se favorece es el que está al margen de la ley”, lamentó.

Finalmente, Rivero aclaró que el LINTI, “nunca tuvo nada que ver con Moyano, es payasesco pensarlo” y enfatizó en que, “los que somos del sector sabemos que no tiene nada que ver con la capacitación”, afirmó.