El titular de la CONADU, Carlos De Feo, sostuvo que la cartera educativa ofreció un incremento global de 20,5 por ciento en tres tramos: un 12 en marzo, otro 6 en junio y un 2,5 en septiembre, lo que se sumará a los 2.800 pesos para el cargo testigo y a los 1.400 para todos los cargos simples, en su mayoría ayudantes.
También se agregará a esa mejora una recomposición del nomenclador hasta el 1,685 por ciento, indicó el dirigente.
«Esta nueva oferta implica dos puntos más de aumento y adelantar las cuotas, de manera que dos se estarían percibiendo de forma previa al primer aguinaldo (en marzo y junio), lo que significaría un acto de justicia la garantía para los cargos simples», afirmó.
De Feo reseñó que el gremio ya aceptó la carrera docente, «una demanda histórica de los universitarios que integra las reivindicaciones del sector desde hace 27 años y procura garantizar la estabilidad laboral y mejorar la calidad académica a partir de evaluaciones permanentes», puntualizó.
La propuesta de la CONADU, avalada por Educación, combina el mecanismo de concursos abiertos con estabilidad laboral mediante informes de desempeño y formación permanente docente.
El plenario de secretarios generales del gremio evaluará el próximo jueves la oferta oficial y, luego, ofrecerá respuestas.
La organización reclamó un aumento que permita sostener «el poder de compra del salario, es decir, entre el 20 y 25 por ciento, por lo que la primera propuesta de un 18,5 fue rechazada».
También planteó «una garantía salarial para el cargo testigo de 2.800 pesos», lo que fue aceptado por el gobierno nacional.
El gremio propuso «un mecanismo de concursos abiertos con estabilidad laboral mediante informes de desempeño y formación permanente a fin de mejorar la calidad educativa y cesar la precariedad de los maestros contratados de forma interina».
La CONADU propuso un programa de fortalecimiento de la docencia en los primeros años a través de la extensión de dedicaciones y formación específica para revertir las elevadas tasas de deserción registradas en las universidades, lo que afecta a los ingresantes de menores recursos y a la primera generación de universitarios.
Del mismo modo, sostuvo la necesidad de implementar un programa de becas para garantizar la formación de posgrado de los docentes universitarios en disciplinas estratégicas para el desarrollo económico, social y cultural del país, con un sentido federal.
«La propuesta consiste en becas de seis meses para docentes de más de 30 años que finalicen sus cursos de posgrado y adeuden la presentación de las tesis, lo que garantizaría la formación de posgrado, priorizando las zonas con menores tasas de posgraduación», puntualizó De Feo en un comunicado de prensa.